Fernández Ordóñez y Shultz no abordaron propuestas nuevas sobre las bases

A pesar del clima de optimismo derivado de la entrevista entre el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, y el secretario de Estado norteamericano, George Shultz, celebrada el viernes en Reikiavik, en medios diplomáticos españoles no se espera un inmediato desbloqueo de las negociaciones bilaterales sobre la reducción de las bases, en la próxima reunión que se celebrará en Madrid los próximos días 25 y 26. Ni Shultz ni el ministro español hicieron ningún tipo de propuestas sobre el contencioso hispano norteamericano.

En cualquier caso, los mismos medios diplomáticos admiten que la entrevista Shultz-Fernández Ordóñez concluyó en un ambiente mucho más relajado y amigable que en anteriores ocasiones (un encuentro "amistoso, constructivo y útil", como se acordó por las dos partes que se definiera públicamente), lo que hace abrigar "moderadas esperanzas" a la parte española de que sus argumentos en la negociación sobre la reducción de las bases se va entendiendo cada día mejor por los norteamericanos, lo que permitirá llegar a un acuerdo final.

Shultz destacó también el "buen ambiente" en que evolucionaban las conversaciones hispano norteamericanas y vaticinó un acuerdo sobre la reducción de las bases. "De una manera o de otra, los problemas van a resolverse", dijo el secretario de Estado.

De los 23 minutos que estuvieron hablando a solas Shultz y Fernández Ordóñez, unos 18 minutos estuvieron dedicados al tema de las bases, según medios cercanos a la delegación española. En los otros cinco o seis minutos, los dos ministros repasaron otras cuestiones, como la sítuación en el golfo Pérsico y el viaje de los Reyes de España a varios estados norteamericanos el otoño próximo.