Los F-16 de la discordia
La entrevista de carácter bilateral celebrada ayer por Fernández Ordóñez se produjo quince días antes de la próxima ronda negociadora hispano-norteamericana sobre la reducción de la presencia militar de Estados Unidos en España. La nueva ronda negociadora, que tendrá lugar en Madrid los días 25 y 26 de junio, será la sexta desde que se inició el proceso negociador, el 10 de julio del pasado año.En aquella ocasión, la parte española hizo una detallada propuesta sobre la pretendida reducción de las instalaciones norteamericanas en España, que debería ser "sustancial y no meramente cosmética", afectando "tanto a personal militar como a instalaciones y equipos", según declaraciones de medios oficiales españoles.
Aunque las sesiones tengan carácter secreto y, en consecuencia, no se conozcan los detalles de las propuestas, se sabe que el meollo de la propuesta española es el parcial desmantelamiento de la base de Torrejón de Ardoz, con el traslado fuera del territorio nacional de los 72 cazabombarderos F- 16, que integran el Ala Táctica 40 1, con misiones en el flanco sur de la OTAN y en Centrocuropa. La parte norteamericana se opuso desde el primer momento a la salida de España de los F-16 estacionados en Torrejón, argumentando que sus misiones eran vitales para mantener la seguridad del flanco sur europeo.
Los norteamericanos, en la cuarta reunión negociadora, celebrada el pasado mes de febrero en Madrid, hicieron una contraoferta, calificada como "un esfuerzo máximo" de Washington, en la que ofrecían trasladar los F-16 desde Torrejón a la base de Motón de la Frontera (Sevilla), dentro de un nuevo convenio bilateral mucho más extenso que el actual, sin límites para su renovación y sin que las futuras misiones aéreas estuvieran sometidas al control y los avisos previos exigidos actualmente por las autoridades españolas.
La parte española rechazó tal contraoferta norteamericana, manteniéndose desde entonces un bloqueo negociador, que no fue superado en una nueva reunión en Washington en abril y que se anunciaba sin cambios para la sesión de los días 25 y 26 de junio. Sin avances concretos en las negociaciones, y según se acerca la fecha límite de tales negociaciones, el próximo 16 de noviembre, el ministro de Asuntos Exteriores anunció en el pasado debate parlamentario sobre paz y seguridad, en el mes de abril, la disposición española a denunciar. el actual Convenio de Amistad, Defensa y Cooperación, entre España y Estados Unidos, sucrito en mayo de 1982.
Medios diplomáticos españoles, en vísperas del encuentro de Fernández Ordóñez con George Shultz en Reikiavik, dijeron que en principio no se esperaba ningún avance signficativo en el tema de las bases, añadiendo que. el ministro español reiteraría a Shultz la "absoluta firmeza" de la posición española y la disposición del Gobierno de Madrid de denunciar el convenio que expira en noviembre. Los mismos medios diplomáticos rechazaron que la propuesta española sobre la reducción de las bases pudiera ser modificada ante la importancia que cobrarían las armas convencionales en Europa en el horizonte de la nueva situación internacional derivada de las propuestas de desarme soviéticas.
