Mayor apertura del mercado japonés a España y Portugal

La Comisión Europea solicitará hoy a los titulares de Asuntos Exteriores de los doce un mandato para poder negociar con Japón un mejor acceso de los productos españoles y portugueses a su mercado. Las relaciones comerciales entre la Comunidad Europea (CE) y Japón serán justamente el principal tema inscrito en el orden del día del Consejo de Ministros, que durará 48 horas y al que asistirá en representación de España Pedro Solbes, secretario de Estado.

El ingreso en la CE obligó a los dos nuevos Estados miembros a rebajar sustancialmente el arancel que imponían a los productos made in Japan, que muchas veces quintuplicaba la tarifa aduanera común (TAC) del 5%, al que deberán adaptarse paulatinamente. Esta reducción del arancel, combinada con la agresividad nipona, ha permitido a Japón incrementar en 1986 sus exportaciones a la Península en un 30%, lo 1.200 millones dé dólares (150.000 millones de pesetas).A cambio de estas concesiones, España y Portugal no han obtenido contrapartida alguna por parte de Japón, motivo por el cual el Ejecutivo comunitario desea ser mandatado para negociar con Tokio en Ginebra en el marco del Acuerdo General sobre Comercio y Aranceles (GATT) una mayor apertura del mercado japonés a toda una serie de exportaciones peninsulares como los derivados de tomate, frutas en conserva, zumos de fruta, vinos embotellados, cavas, calzado, pieles de cordero etcétera.

Si la negociación fracasase, la Comisión pide poder renunciar a la "consolidación" acordada en el GATT de seis productos japoneses: tocadiscos compactos, grabadoras numéricas, órganos eléctricos, amplificadores, hornos microondas y algunas piezas de vídeos. Esta medida no significa que el arancel al que son sometidos vaya a aumentar inmediatamente, pero sí permite tomar eventualmente esa decisión de la noche a la mañana.

Posición española

Una mayoría de Estados miembros, incluida España, es favorable a conceder a la Comisión el mandato que solicita, pero no está aún claro si la minoría de bloqueo será lo suficientemente fuerte como para impedir que le sea otorgado.

La otra vertiente de la negociación sobre las relaciones comerciales con Japón, que tendrá lugar hoy a primera hora de la noche, concierne a la adopción, de un reglamento que autorice al Ejecutivo europeo a aumentar drásticamente el arancel si observa un incremento anómalo de las exportaciones a la CE de los productos japoneses -ordenadores personales, televisores en color y herramientas eléctricas sancionados en Estados Unidos con un gravamen del 100%.

Desde principios de mayo, las ventas en el Viejo Continente de estos artículos están siendo sometidas a vigilancia estadística mediante presentación de un certificado de origen, para localizar cualquier intento japonés de colocar en la CE los productos que no traspasan ya la frontera norteamericana.

La Comisión Europea alega que replicar con la imposición de una sanción arancelaria es compatible con las reglas del GATT, que lo permiten si se constatan "desviaciones de tráfico", provocadas en este caso por el acuerdo entre Tokio y Washington sobre semiconductores, cuyo mal funcionamiento incitó a la Administración de Ronald Reagan a tomar medidas contra Japón.