Cotilleos reales
Las primeras páginas de los periódicos ingleses rezuman tristeza e indignación: "El Príncipe Carlos está en crisis. Triste y solitario, Diana le ha empujado a la sombra". "La luna de miel se acabó. Diana: he caído en una trampa". "Carlos ha elegido mal a su mujer".Y así hasta que el 3 de mayo el News of the World anuncia con grandes titulares: "Carlos y la condesa". En las páginas centrales aparece la historia de amor del príncipe con la bella y rica aristócrata florentina, Fiammetta Frescobaldi.
¿Cómo funciona el negocio de la chismorrería sobre la familia real inglesa? ¿Cómo se descubren o se inventan las noticias? ¿Cuánto están dispuestos a invertir los periódicos por una exclusiva que hace vender más decenas de millares de ejemplares?
La profesión de "observador de la familia real" es fatigosa. Los miembros de la familia real inglesa odian desvelar los detalles de su vida privada. Y los jefes de Prensa de Buckingham Palace, apodados los abominables hombres del no, protegen esta intimidad; la Reina, por ejemplo, no ha concedido una entrevista en toda su vida.
Sólo quedan las vías oficiosas, agresivas, a veces poco ortodoxas. Carreras vertiginosas de un sitio a otro en pos de una pista; apostarse día y noche en coche con la esperanza de entrever a alguien; teleobjetivos potentes como ametralladoras y trucos para despistar a los colegas rivales.
23 de mayo
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