Alan García pide que la Prensa dé menos cobertura informativa al terrorismo
Siete resoluciones, sobre otros tantos conflictos que afectan a la libertad de prensa, fueron aprobadas en la clausura de la 36ª Asamblea General del Instituto Internacional de Prensa (IPI), en la noche del viernes. Esta asamblea, primera que este organismo no gubernamental dedicado a defender la libertad de expresión celebra en América Latina, atrajo a cerca de 400 delegados a Buenos Aires y Montevideo.
La clausura de la Asamblea del IPI, a la que asistió el presidente del Perú, Alan García, concluyó asimismo con una condena a la retención de periodistas como rehenes en el Líbano.Aunque inicialmente se temió que Alan García no pudiera acudir a la clausura de la Asamblea, a causa de una huelga de la policía de Lima que causó cierto caos en el país, el presidente peruano viajó finalmente a Uruguay como estaba previsto, pero con un significativo retraso.
Las resoluciones aprobadas se refieren a América Latina, Suráfrica, Hong Kong, Singapur, Fiyi y la retención de periodistas como rehenes. Destacan las dos declaraciones distintas sobre América Latina, una en la que se recalcan los progresos generales y otra en la que se detallan los retrocesos de la libertad de prensa en lugares como Colombia -por los asesinatos de periodistas a manos de los narcotraficantes-, Chile y Paraguay
Coincidiendo justamente con la asamblea del IPI, el régimen del general Pinochet ha vuelto a castigar a la prensa: Juan Pablo Cárdenas, director del semanario de oposición Análisis, ha sido condenado a 541 días de cárcel por "ofensas" al dictador. Con esta sentencia se impide que Cárdenas acuda el martes próximo a Helsinki a recibir la Pluma de Oro a la Libertad 1986, máximo galardón de la Federación Internacional de Editores de Diarios (FIEJ).
En su larga intervención ante los periodistas, García defendió la actuación de su Gobierno en la lucha contra la violencia guerrillera y en el pago de la deuda externa.
Alan García hizo hincapié repetidas veces en el vigor de la democracia peruana y en la libertad y pluralidad de la prensa de su país: "Nueve emisoras de televisión, 15 periódicos y 60 emisoras de radio funcionan en plena e irrestricta libertad en Lima". Apeló al "sentido de la responsabilidad, a la propia conciencia de los periodistas, y no a una acción censora del Gobierno, que no aceptamos" para que se modere la cobertura que los medios dan de los actos terroristas.
La actual violencia de Sendero Luminoso es, según García, "no racional e ideológica, como aquella nacida en los años sesenta y simbolizada por el Che Guevara, sino emocional, nacida del ciego impulso destructor de pueblos andinos que tras siglos de inmovilismo y total abandono ya no creen en el cambio o el progreso".
Violencia irracional
Esta violencia "irracional" precisa más que la otra, según García, de la publicidad que da la prensa, ya que se "alimenta" de ella. García, quien clausuró la asamblea en presencia del presidente uruguayo Julio María Sanguinetti, reiteró que su nacionalismo económico es la única manera de ganar credibilidad y legitimidad para la democracia peruana, y que ello merece el respaldo de la opinión en los países democráticos, pese a las dificultades que ha creado el pago reducido de la deuda externa.Estas declaraciones vinieron a subrayar las que el pasado jueves efectuó el presidente uruguayo, en las que apelaba a la solidaridad entre los países iberoamericanos para resolver juntos los problemas socioeconómicos, de lo que dependía, en su opinión, "la legitimidad de la democracia en este continente".
Conectado en directo a la radio y televisión peruanas, García se dirigió tanto a los periodistas como, para consumo interno, a sus propios conciudadanos. La 36ª Asamblea General del IPI fue inaugurada el pasado lunes en Buenos Aires, bajo la presidencia de Raúl Alfonsín, quien insistió en el papel conciliador de la democracia que preside.
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