Hoy están previstos paros en Iberia, Renfe, Aviaco, FEVE y Trasmediterránea

Más de un millón de usuarios se verán afectados por la huelga del transporte público que, en el espacio de pocos días, vuelve a paralizar las cornunicaciones. A los conflictos de Ibería, Aviaco y Renfe vienen a sumarse los paros de dos horas en FEVE y la huelga de 24 horas en Trasmediterránea en Semana Santa. Las acciones de protesta en estas empresas -a las que se unen los paradores nacionales-obligarán a muchos españoles a realizar los desplazamientos en automóvil, lo que contribuirá a congestionar aún más las carreteras, que en estas fechas suelen registrar un notable aumento de tráfico. Losservicios mínimos y otra serie de acciones encaminadas a paliar los efectos de las movilizaciones no parecen suficientes para evitar el caos que previsiblemente se producirá en estas vacaciones.

La conflictividad provocada fundamentalmente por la negociación colectiva tendrá en el día de hoy y el próximo día 15 sus momentos más intensos. Cientos de miles de usuarios de los medios de transporte público sufrirán los trastornos derivados de las huelgas convocadas en Iberia, Renfe, Aviaco, FEVE, Trasmediterránea... Sólo en el día de hoy, unos 350.000 viajeros se verán afectados directa o indirectamente por los conflictos. Cálculos bastante ajustados apuntan que un número de personas superior al millón verán alterados de una u otra forma sus planes de desplazamiento durante esta semana.La jornada de hoy, en que la Iglesia celebra el Viernes de Dolores y víspera de las vacaciones de Semana Santa, coincide conla convocatoria de movilización general efectuada por CC OO. Paros, manifestaciones y concentraciones en diversos sectores -metal, construcción, sanidad- y decenas de empresas -Pegaso, Cosesa, CASA, FASA-Renault- contribuirán a aumentar el previsible caos de comunicaciones. Los servicios mínimos -pactados entre sindicato y empresas- en muy poco atenuarán los eiectos de las protestas.

Las dificultades para el transporte se verán relativamente incrementadas si, como está anunciado, se lleva a cabo la huelga de distribuidores de productos petrolíferos. Los conflictos relacionados con las gasolinas tienen efectos un tanto artificiales y aumentan con la aparición del síndrome de la escasez que parece apoderarse de los automovilistas, que, lo necesiten o no, acuden a llenar sus depósitos en cuanto se anuncia la posibilidad de huelga.

En principio, esta huelga sólo está prevista en 15 provinclas para los días 15, 16, 18 y 20, y, en cualquier caso, fuentes de Campsa han asegurado que se pondrían en marcha sistemas de distribución que garantizasen el abastecimiento de carburante.

En el caso de las grandes empresas públicas de transporte, los efectos de la huelga se dejarán sentir los días siguientes al conflicto. Los servicios de Iberia y Aviaco sufrirán algunas anomalías los días 11 y 16 de abril, fechas inmediatamente posteriores a los paros. Durante el conflicto, en Iberia funcionarán 53 vuelos, los insulares y uno de enlace entre Madrid, Barcelona, Málaga, Santiago, Bilbao y Sevilla. En Aviaco, sólo los insulares.

Renfe ha establecido unos servicios mínimos que garantizan el funcionamiento de un tren nocturno entre Madrid y cada una de las principales ciudades. Durante el día 10 no circula ningún tren diurno de largo recorrido. En cercanías funcionará del 50% al 75%, de los servicios habituales entre las seis y las nueve de la mañana y las seis y las ocho de la tarde. La compañía ferroviaria ha puesto en práctica un sistema de regreso gratis para aquellos pasajeros que utilicen los 24 trenes especiales que comenzarán a funcionar inmediatamente después de finalizar la huelga; es decir, en la madrugada del día 11.

En Ferrocarriles de Vía Estrecha (FEVE), los paros son parciales, de ocho a diez de la mañana y de seis a ocho de la tarde, los días 10, 15 y 17 de abril. La huelga de coches cama ha quedado desconvocada al haberse producido un acercamiento entre la compañía y los representantes de los trabajadores.

Se calcula que en los dos días de huelga -el 10 y el 15-, en situación de normalidad, hubieran utilizado el ferrocarril unas 900.000 personas. El transporte aéreo es utilizado en fechas como ésta por unos 125.000 viajeros. En total, más de un millón de personas que de una u otra forma verán alterados sus planes de desplazamientos en estas vacaciones.

Intentos fallidos

Los últimos inteiritos para desconvocar los paros, sobre todo en las empresas públicas de transporte, se han saldado con el más absoluto fracaso. Renfe planteó el pasado miércoles una subida salarial del 5,4%, que fue rechazada por los sindicatos por entender que estaba muy lejos de sus peticiones, entre el 7% y el 8% de incremento salarial.