Chaves, dispuesto a mediar en los conflictos

"Si las partes -empresas o trabajadores- acuden al Ministerio de Trabajo para que medie o arbitre en sus conflictos, no tengan la menor duda de que estamos dispuestos a asumir esa función", declaró ayer el titular del Departamento, Manuel Chaves, ante la comisión del Congreso de Diputados, donde Nicolás Sartorius le había acusado de pasividad.Este portavoz de Izquierda Unida dijo que es propia de un sistema autoritario la llamada al orden efectuada por el ministro del Interior con motivo de las movilizaciones de esta semana, en la que estimó una participación de 945.000 trabajadores.

Los datos de Sartorius, quien expuso una plataforma de cinco puntos para resolver el conflicto en Reinosa -nada de expedientes, solución similar a la reconversión de bienes de equipo, fallos de la Dirección General de Trabajo en contra de la rescisión de contratos y retirada de las fuerzas de orden público- proceden de CC OO. Se basan principalmente en las siguientes cifras: 250.000 trabajadores por el convenio de la construcción, 200.000 por la ley de retribuciones en la sanidad estatal, 50.000 contra la reconversión en diversos ramos del metal, 70.000 por el convenio de vidrio y cerámica, 63.000 por el de Renfe, 21.000 por el de Iberia, etcétera.

Manuel Chaves criticó la utilización de datos antes de que se hayan confirmado las movilizaciones e insistió en que el Ministerio de Trabajo mantiene una actitud abierta al diálogo. Aunque dijo que el problema de Reinosa "no solo es de orden público", afirmó que mientras no haya calma se puede impedir u obstaculizar una solución negociada.

Ya en los pasillos del Congreso, el ministro manifestó confianza en que durante los próximos días disminuya la conflictividad, precisó que parece algo menor a la de 1984 por las mismas fechas, dijo desconocer la respuesta de UGT a la circular del PSOE y afirmó que las relaciones UGT-PSOE permanecen "estancadas, aunque hay esfuerzos por ambas partes para recuperarlas".

Por otra parte, la iniciativa del Ministerio del Interior para reunir a los sindicatos y estudiar la forma de evitar que los conflictos laborales terminen en enfrentamientos policiales, parece haber tenido escaso eco. El secretariado de CC OO difundió un duro comunicado contra la propuesta de Interior en el que se indica que "no es de recibo que ésta sea la única iniciativa del Gobierno". Y se acusa al Gobierno de cerrazón para el diálogo. Al mismo tiempo se recuerda que CC OO se ha mostrado particularmente respetuosa con la legalidad y los cauces democráticos.