Una modelo adicta a la heroína, asesinada de 57 puñaladas en un descampado de Fuencarral

Ángeles Díez Gil, de 24 años, modelo de profesión y adicta a la heroína, fue asesinada de 57 puñaladas en la madrugada del pasado lunes en un solar situado en el número 17 de la calle de Murias, en el distrito de Fuencarral (Madrid). Según personas allegadas al caso, un súbdito marroquí ha sido arrestado por la policía como supuesto autor del crimen. La víctima había acudido a la zona de Peña Chica para conseguir una dosis de caballo (heroína), droga a la que era adicta desde hacía un año. Ángeles había conseguido una plaza para ser sometida a un tratamiento de desintoxicación en el hospital Ramón y Cajal, centro en el que tenía que haber ingresado hoy. El cadáver fue encontrado desnudo de la cintura para abajo y con una botella de cerveza en el ano.

Unos niños que jugaban en el solar de la calle de Murias descubrieron el cuerpo de la joven alrededor de las siete de la tarde del pasado lunes.El cadáver presentaba más de 50 puñaladas, erosiones en la cara y diversos cortes en las dos piernas. Junto al cuerpo, que estaba cubierto con un colchón, en medio de un gran charco de sangre, se encontraron unas bragas ensangrentadas y varias jeringuillas. La joven podría haber sido violada, aunque este hecho no fue confirmado por la policía.

Los vecinos del barrio de Peña Chica manifestaron que no habían escuchado ningún ruido extraño durante la noche del domingo, aunque aseguraron que el solar es frecuentado por drogadictos. El solar donde fue encontrado el cuerpo está vallado y en su interior hay una pequeña construcción de hormigón con techo de uralita. "Esto es un hervidero", aseguró una señora. "En más de una ocasión, la policía ha sacado de ahí a chicos y chicas medio desnudos y en un estado lamentable".

El barrio de Peña Chica lo componen en su mayor parte casas bajas antiguas. Los vecinos de la zona, algunos en bata y en zapatillas, comentaban en corrillos el terrible suceso.

Los padres y las dos hermanas de la víctima se encontraban ayer desesperados por el trágico final de la joven. La noche del pasado domingo, la víctima llamó a su madre para avisarle de que llegaría tarde a casa porque se había encontrado con un amigo. Esa fue la última vez que hablaron con ella, hasta que la policía les avisó de que había sido encontrado su cadáver.

Una de sus hermanas explicó que Ángeles empezó a consumir heroína hace aproximadamente un año. Ángeles, una joven rubia atractiva, había trabajado como modelo especializada en pasarela y su nombre artístico era Yela.

Vivía con sus padres y con una hermana pequeña. Como consecuencia de su adicción abandonó su empleo de modelo y durante un tiempo estuvo trabajando como modista. En los últimos tiempos, la víctima no desempeñaba ningún trabajo y se había quedado muy desmejorada físicamente. Su familia especulaba ayer con la posibilidad de que la joven robara de cuando en cuando en las tiendas para conseguir mercancía que intercambiaba por droga.

Plaza en el Ramón y Cajal

Sus familiares explicaron que Ángeles solía acudir a Peña Chica en busca de droga. La víctima, "después de mucho peregrinar de un hospital a otro", había conseguido una plaza en el hospital Ramón y Cajal, donde tenía que haber ingresado hoy para ser sometida a un tratamiento de desintoxicación.Ángeles comenzó a inyectarse caballo "por los amigos", según la familia. Durante seis años mantuvo relaciones con un chico. Esta relación sentimental se rompió hace aproximadamente un año. Estaba fichada por la policía en relación con el robo de unas casetes.

La policía no confirmó oficialmente la detención de un marroquí como presunto autor del crimen, aunque sí la de un joven supuestamente implicado. En poder del detenido, según personas allegadas al caso, se habían encontrado la documentación y el bolso de la víctima. El entierro de la joven se celebrará hoy en el cementerio de Fuencarral.