El Comité olímpico Español, sin poder de decisión en temas económicos del COB 92
El Ayuntamiento de Barcelona ha exonerado de cualquier tema económico al Comité Olímpico Español (COE), según figura en el acuerdo sobre el Comité Organizador Barcelona 92 (COB 92) que ayer firmaron los representantes de ambos organismos. El acuerdo contó con el visto bueno de la junta de federaciones olímpicas, que se reunió el pasado martes. El tema de la exoneración económica fue el punto más conflictivo de la reunión de la junta de federaciones olímpicas, ya que significa que el COE tendrá voz, pero no voto, en todos los temas económicos, aunque algunas presidentes de federación lo habían exigido.
Los representantes de las federaciones, Manuel Fonseca, Feliciano Mayoral y Roberto Tendero, que negociaron la matización de ese punto, no tuvieron éxito. No obstante, la junta de federaciones. logró tener dos representantes en la Permanente del COB 92. El próximo viernes tendrá lugar la formación oficial del Comité de Enlace y ese mismo día una delegación viajará a Lausana, sede del Comité Olímpico Internacional (COI), para obtener el refrendo de los correspondientes estatutos.La reunión entre los representantes del COE y del Ayuntamiento de Barcelona tuvo una duración de dos horas y al finalizar la misma las dos partes aseguraron: "Todos hemos actuado con grandes dosis de responsabilidad; de ahí que nadie haya tenido que ceder en puntos concretos".
En realidad, todo se había decidido el martes, cuando la junta de federaciones olímpicas dio el visto bueno a los acuerdos. La reunión, que sirvió para pedirle de nuevo a Alfonso de Borbón que dimitiera de su cargo, fue convocada en Madrid para aprobar el principio de acuerdo al que habían llegado los representantes del COE y el Ayuntamiento de Barcelona (Josep Miquel Abad, Jordi Serra y Enric Truñó).
Una vez leído el texto del acuerdo, y pese a que la mayoría de los presentes dieron su visto bueno, se debatieron dos puntos importantes. Algunos presidentes consideraron perjudicial para el COE el apartado que exonera al máximo organismo olímpico de todos los temas económicos. Parece claro que la decisión de qué temas son económicos la tiene por completo el Ayuntamiento que, con la aportación del Estado, es mayoría. El COE, con voz, pero sin voto, se verá privado de participar en las grandes decisiones de la organización de los juegos.
"Hay que tener en cuenta", manifestó ayer a este periódico otro de los presidentes asistentes, "que todos los temas relacionados con los Juegos Olímpicos tienen un fondo económico. Número de participantes, ubicación de las instalaciones, características de éstas... todo puede decidirse bajo el prisma económico y, por tanto, corremos el peligro de no tener voto en los momentos importantes". Los representantes del COE accedieron a firmar este punto porque en la junta anterior al inicio de las conversaciones, un grupo encabezado por Benito Castejón pidió que se tuviera en cuenta que, según consta en uno de los artículos de la Carta Olímpica, pasados seis meses de la clausura de los juegos, las pérdidas económicas recaen sobre el COE.
Los riesgos
Ese temor hizo que la delegación del COE aceptase la exoneración económica que le ofrecía el Ayuntamiento. "Yo creo", apuntó otro de los presentes, "que el error fue advertir que no estábamos dispuestos a correr riesgos económicos, ya que eso hizo que el otro socio considerara, con razón, que si no tenemos responsabilidad al final, tampoco debíamos tenerla al principio".El sector que defendía esta tesis considera que no debía de haberse planteado la exoneración. "Al fin y al cabo, todo el mundo es consciente de que el comité no puede hacer frente a déficit alguno y si hubiese llegado el momento, lo único que nos embargarían sería un edificio, cinco mesas y doce sillas". Lo que sí tendrá el COE es un papel deportivo importante.
