La familia Ruiz-Mateos pierde ante los tribunales de justicia norteamericanos todos los derechos sobre la marca Dry Sack
El tribunal del distrito norteamericano de Columbia (Washington D. C.) ha asestado un duro golpe a las aspiraciones de José María Ruiz-Mateos de llevar el caso Rumasa a un escenario jurídico de tanta resonancia como el norteamericano. El juez June L. Green rechazó el pasado martes, día 20, la solicitud de intervención en el pleito de Estados Unidos de los hermanos Ruiz Mateos, y falló a favor de Williams & Humbert Ltd. en su petición de juicio sumarial y de reconocimiento de la decisión de los tribunales de justicia británicos. Ello supone que Wílliams -el Patrimonio del Estado español, en último caso- ha ganado el pleito de EE UU sin haber tenido que celebrar la vista.El pleito norteamericano entre la Williams expropiada y la W & H Trade Marks (Jersey) Ltd, fundada por Ruiz-Mateos en la isla de Jersey, se inició en 1983 y quedó paralizado por acuerdo de las partes en espera de la resolución de los tribunales británicos.
Sin embargo, cuando el juez Walton fallo a favor de la Rumasa expropiada el 26 de marzo de 1986, Ruiz Mateos negó la validez de dicha sentencia fuera de la jurisdicción británica. En su lugar, activó el pleito norteamericano, donde pensaba. hacerse fuerte de la mano del abogado Arthur Teele. El meollo de la estrategia de los abogados del empresarío jerezano ha sido siempre lograr que los tribunales norteamerícanos debatan si la expropiación de Rumasa debe ser o no reconocida en EE UU.
Juicio sumarial
Los seis hermanos Ruiz-Mateos decidieron a primeros de noviembre pasado personarse como parte en el pleito, reclamando la propiedad de la marca Dry Sack no solo frente a la Williams española, sino también frente a la Williams de Jersey por ellos creada. El juez Green ordenó el día 20 denegar esa solicitud de intervención en el pleito de la familia Ruiz-Mateos. Y lo que es más importante, el mismo juez falló a favor de la petición de Williams & Humbert Ltd. de levantar la paralización que existía sobre el pleito desde 1983 y de que se dictara sentencia sumarial, debido a "la existencia de excepción de cosa juzgada", alusión a las sentencias de los tribunales británicos.En virtud de dicho fallo sumarial, Williams & Humbert Ltd. tiene "con caracter único y exclusivo el derecho de usar las marcas registrales Dry Sack de Jerez en Estados Unidos". Además, el demandante (Williams) "es el propietario de todas y cada una de las marcas registradas en los EE UU y de las solicitudes de registro de la marca registral Dry Sack". El demandado " no podrá transferir o disponer de ninguna de las marcas registrales Dry Sack o registrar las mismas en Estados Unidos a nombre de un tercero".
En el párrafo quinto de la sentencia, el juez Green puntualiza que al demandado le queda "permanente prohibido", entre otras cosas, interferir o amenazar con interferir en el uso por parte de Williams de la marca Dry Sack; usar las marcas registrales Dry Sack o cualquier otra denominación similar que pudiera conllevar a confusión; transferir, ceder o disponer de las marcas registrales Dry Sack; iniciar pleito o perseguir judicialmente el derecho de Williams a usar las marcas y violar las marcas registrales de Williams".
Fuentes cercanas a Ruiz-Mateos consultadas por este periódico rebajaron,ayer la importancia de este fallo, señalando que "el juez ha dicho únicamente que no corresponde a la familia personarse en ese pleito entre las dos Williams". "Ahora va a empezar el verdadero pleito norteamericano de Rumasa". Será, según ello, un tercer escalón, conformado por una "demanda directa y nueva de la familia Ruiz-Mateos contra Williams & Humbert Ltd. y contra Rumasa por la expropiación de un activo en los FE UU que no ha sido objeto de indemnización".
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