Muchos nervios para un difícil fin de semana
Los mercados de valores han confirmado su trayectoria al acentuar el proceso de selección que vienen registrando desde hace un par de meses. Al conocido mal de altura que padecen algunos valores hubo que añadir en la jornada de ayer los temores propios de la proximidad del fin de semana, pues los tanteos del papel se han prodigado, aunque siempre en casos muy concretos. Esto ha hecho que el volumen del negocio se haya mantenido prácticamente en los mismos niveles que en las jornadas precedentes, pero con la particularidad de que algunos valores, en los que está centrada la máxima atención del mercado, se encuentran próximos al estrangulamiento por la falta de papel. Las tensiones que provocan los distintos objetivos escogidos por oferta y demanda se están traduciendo en un mercado confuso, pero orientado al alza, aunque ésta se base cada vez en un número menor de valores.Los primeros síntomas vendedores se dieron otra vez entre los valores eléctricos, que vuelven a demostrar que la situación que atraviesan es bastante delicada. Sin embargo, las bajas registradas por este grupo se vieron compensadas por el efecto de la selección, al ganar Endesa 11 enteros. El escaso empuje del grupo contrasta con el volumen de operaciones que viene manteniendo, que en ocasiones, como la del miércoles, supera los 2.200 millones de pesetas efectivas.
Comunicaciones fue otro de los grupos que ha sufrido las consecuencias del síndrome del fin de semana, con un recorte de 7,25 enteros a cargo de su representante. La atención de los inversionistas continúa centrada sobre todo en los grupos industriales en general, y en sus valores de primera fila más concretamente. El lugar destacado vuelve a conseguirlo construcción, con un avance sectorial de 12,09 puntos, lo que reafirma la posición del grupo, por encima del 400%. Los tres subsectores en que se divide han registrado subidas muy fuertes, destacando las conseguidas por Dragados, con 29 enteros, y la de Asland con 37, al tiempo que las posiciones de dinero sin operaciones se prodigan en este sector. La falta de papel empieza a ser preocupante en algunos de los grupos industriales, dado que la mayor parte de la demanda se sigue centrando en ellos.
Los valores bancarios han mantenido las diferencias que desde días atrás se manifiestan entre la primera y la segunda fila. Los siete grandes registran un equilibrio precario entre compras y ventas, mientras que vuelve a aumentar el volumen negociado hasta rozar los 700.000 títulos, si bien en esta ocasión los retrocesos han conseguido imponerse. Por el contrario, los valores de segunda fila son los que han animado al sector, gracias a sus continuos avances y a que en buena parte las peticiones se están dirigiendo hacia ellos. En cuanto al cierre, los nervios han vuelto a hacer su aparición al ofrecerse a última hora papel de algún valor de construcción, precisamente uno de los que más habían subido en esta sesión. El resto se mantenía bajo la acostumbrada diversificación de oferta y demanda, que, una vez más, pospone las decisiones para el cierre semanal.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.