_
_
_
_

"Nací inglés, moriré europeo"

I. C. Aplaudido por sus seguidores en la Asamblea de Estrasburgo, puestos en pie, mientras los diputados de izquierda permanecían sentados, sir Henry Plumb, de 61 años, caminó hasta la tribuna poco antes de las cinco y media de la tarde -hora peninsular española- para pronunciar su primer discurso como presidente. En él prometió a aquellos que no le habían respaldado "ser el representante del conjunto del Parlamento". El nuevo presidente intentó desactivar las críticas de los colegas que le consideran insuficientemente partidario del reforzamiento de la Comunidad Europea (CE) e hizo hincapié en que ahora pertenece a Europa: "Nací inglés, moriré europeo.

Antes de concluir una alocución que completerá hoy con un discurso más oficial, Plumb elogió veladamente al candidato socialista, el español Enrique Barón, recordando que él y su rival "habían nacido el mismo día del año y tenían prácticamente el mismo nombre", y aseguró que "a lo largo de una campaña en la que no llegó la sangre al río" se habían establecido entre ellos lazos de amistad.

Más información
Barón pierde la presidencia del Parlamento Europeo

Al margen de interpretar el reglamento y de actuar como conciliador entre los diversos grupos políticos, el papel del presidente del Parlamento cons,iste fundamentalmente en flirmar el presupuesto de la CE después de haber apreciado si la Asamblea ha llegado a un acuerdo con el Consejo de Min:istros, instituciones que son las dos ramas de la autoridad presupuestaria.

Al presidente le incumbe también, obviamente, la representación política del Parlamento e incluso, en cierta medida, la de la Europa comunitaria, sobre todo desde que la Comisión Europea tiende a desarrollar una labor predominantemente técnica. La liberal francesa Simone Veil fue, sin duda, la que más potenció en su día este papel, al multiplicar sus viajes.

La elección de Veil, en 1979, fue la primera que se realizó por un Parlamento elegido por sufrario universal directo. Sus sucesores fueron el socialista holandés Pietr Dankert (1982-84) y el democristiano francés Pierre Pflimlin.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_