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TEMPORAL DE FRÍO

Tres estaciones del "metro' de Madrid, abiertas para cobijar a los indigentes

Madrid sufrió en la madrugada de ayer la temperatura mínima de este invierno, al registrarse 4,8 grados bajo cero a las siete de la mañana. Ello movió a los responsables de Protección Civil a mantener abiertas esta madrugada las estaciones de metro de Callao, Ópera y Tirso de Molina para dar cobijo a los indigentes remisos a acudir a un albergue. En la región se alcanzaron los 15 grados bajo cero en el puerto de Navacerrada, en el que, al igual que en todos los puertos provinciales, fue obligatorio el uso de cadenas. El cadáver de un anciano de 73 años fue encontrado en estado de congelación ayer por la mañana en Colmenar Viejo, cerca de la autopista que une esta localidad con Madrid.

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El albergue municipal madrileño de San Isidro, con 271 plazas para indigentes, y la nave habilitada por Protección Civil en el pabellón de Guadalajara de la Casa de Campo, con 100 plazas, fueron ocupados ayer por 242 y 75 personas, respectivamente, según informó Pilar Fernández, responsable de Asistencia Social del Ayuntamiento.Esta ocupación, superior a la de los últimos días, se produjo después de que la policía recogiera durante la noche a 28 hombres, todos ellos mayores de 50 años, que pernoctaban en la vía pública. En años anteriores y en situaciones similares se produjeron media docena de fallecimientos por frío.

Según datos del Instituto Nacional de Meteorología, a las tres de la mañana, en la Ciudad Universitaria, se alcanzaron los 2,8 grados bajo cero. A las siete de la mañana se alcanzaba la mínima, con 4,8 grados bajo cero. Estas temperaturas fueron acompañadas de un viento que llegó a ser de 25 kilómetros por hora y que obligó a los bomberos a realizar varias salidas al caer en la vía pública un árbol y algunos toldos.

Según informó Ángel Luis Ibáñez, director de servicios de protección civil y bomberos, aunque el plan de emergencia contra el frío prevé que hasta cinco estaciones de metro permanezcan abiertas cuando se alcanzan los cinco grados bajo cero, la medida no fue adoptada durante la madrugada de ayer. "Las previsiones del Instituto Nacional de Meteorología no permitían pensar en unas temperaturas tan extremas como para adoptar las medidas correspondientes a la última fase del plan", dijo.

Sin embargo, a la vista de que las previsiones indicaban el mantenimiento de la situación meteorológica, Protección Civil decidió solicitar a la Compañía Metropolitano la apertura durante la noche de las estaciones de Callao, Ópera y Tirso de Molina, con objeto de dar cobijo a aquellas personas que se muestren remisas a ser trasladadas a un albergue.

Averías en los suministros

Las bajas temperaturas han propiciado también numerosas averías en el suministro eléctrico y de gas, debido al uso ininterrumpido de radiadores y calefacciones. La centralita de Gas Madrid estuvo bloqueada durante gran parte de la noche de ayer debido a las frecuentes llamadas de usuarios para informar de la existencia de averías en diversos puntos de la ciudad.Como consecuencia del frío, sobre el pavimento de numerosas calles se formó hielo, lo que motivó caídas de peatones y accidentes de carácter leve entre los automovilistas. Los servicios de limpieza del Ayuntamiento tuvieron que esparcir sal con objeto de evitar la formación de capas heladas en los accesos a la capital, en la M-30 (carretera de circunvalación) y en diversas calles del centro.

Cadenas en los puertos

En la región fue obligatorio el uso de cadenas en todos los puertos -a media mañana se abrieron los de La Morcuera, Canencia y Navafría, que se encontraban cerrados al tráfico- y hubo que habilitar un carril suplementario por sentido en el túnel de Guadarrama para facilitar el paso por la sierra madrileña. La temperatura media en los puertos era en la mañana de ayer de 10 grados bajo cero, con fuertes ventiscas.La carretera N-601 quedó cortada al tráfico a su paso por el puerto de Navacerrada, al que sólo era posible acceder desde Madrid utilizando cadenas.

En Colmenar Viejo, a 30 kilómetros de Madrid, fue descubierto ayer por la mañana, a unos 20 metros de la autovía que une el municipio con Madrid, el cadáver de Guillermo Molinello Fernández, de 73 años.

Un familiar de la víctima informó que Molinello falleció de un infarto de miocardio. Su cuerpo fue encontrado en estado de congelación. El anciano, vecino de la localidad, había abandonado su domicilio familiar la tarde anterior y murió en el camino de regreso.

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