Malestar policial por la carga de agentes privados de seguridad el domingo en el Bernabéu

La carga de agentes privados de seguridad que el pasado domingo se efectuó en el estadio Santiago Bernabéu ha sido fuertemente criticada por los miembros del Cuerpo Nacional de Policía que cada jornada cumplen labores de seguridad ciudadana en el campo de fútbol. Este malestar se debe, según los sindicatos policiales, a que cargas de este tipo pueden provocar el pánico y producir oleadas humanas de imprevisibles consecuencias.

El Real Madrid tiene contratados los servicios de la empresa de seguridad Protecsa. En partidos considerados normales en cuanto a afluencia de público, esta empresa destaca a unos 80 de sus agentes en el Bernabéu. Buena parte se destina a controlar a los ultrasur. El Madrid gasta por este concepto unas 500.000 pesetas por partido. La Dirección General de la Policía, por su parte, envía a cada partido a unos 200 hombres.El pasado domingo, una docena de agentes de Protecsa procedieron a desalojar del campo a ocho ultrasur que estaban provocando tumultos. Poco después de la carga, subieron al mismo lugar unos pocos policías nacionales. La policía no critica la expulsión de los revoltosos, sino la carga que efectuaron los agentes de seguridad y que provocó un fuerte movimiento de masas en ese fondo, en el que se abrió un gran claro que dio lugar a avalanchas multidireccionales.El Sindicato Profesional de Policía Uniformada (SPPU) y la Asociación Sindical Independiente de Policía (ASIP) consideran que las cargas en los estadios, realizadas por personas que para estas organizaciones no tienen la debida preparación, pueden provocar oleadas humanas capaces de producir tragedias como la de Heysel.

Javier Tirado, secretario general del SPPU, denunció ayer "la falta de competencias claras en cuanto a los vigilantes jurados. La labor de estos agentes de seguridad en muchos casos es contraproducente con la labor policial". José Alcocer, secretario de organización de la ASIP, calificó de "vergonzosa" la actuación de los agentes de seguridad el pasado domingo en el Bernabéu. "La policía conoce los métodos para desalojar un estadio. Los guardias privados los desconocen y pueden provocar una tragedia".

Testimonios

Por su parte, Manuel Acón, director gerente de Protecsa, señaló ayer que "la carga fue realizada al alimón con la policía". Un informe que Protecsa ha entregado al Real Madrid señala que al ser observados los primeros intentos de avalancha por parte de los ultrasur, los agentes de seguridad intentaron evitar la oleada y fueron escupidos y agredidos. El informe incluye fotografías de palos, bengalas y piedras requisadas a los ultrasur.El Ministerio del Interior, que tiene en proyecto la elaboración de una ley que delimite las competencias entre agentes de seguridad y la Policía, no quiso hacer ayer una valoración formal del asunto, aunque un portavoz recordó: "Una fuerza privada de seguridad debe actuar siempre a las órdenes de la policía cuando ésta se encuentra presente.

Fuentes del Real Madrid, por su parte, indicaron desconocer el malestar de la Policía Nacional respecto a la actuación de los vigilantes jurados, y el comité de disciplina del club estudia el expediente abierto a tres ultras implicados en los incidentes para expulsarles como socios.