Benegas responde a la ruptura de negociaciones del PNV con una nueva oferta a Garaikoetxea

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, declaró ayer en Bilbao que no tiene "ningún temor a encontrarse en la oposición" y atribuyó la ruptura de conversaciones anunciada el sábado por su partido a la falta de una propuesta socialista. Como respuesta, el candidato socialista a presidente del Gobierno vasco, José María Benegas, pidió ayer a Carlos Garaikoetxea, líder de Eusko Alkartasuna (EA), que decida si quiere participar en un Ejecutivo con los socialistas. Benegas afirma que la prioridad de los socialistas es culminar un acuerdo con EA y Euskadiko Exkerra (EE). Ayer, el portavoz de la comisión ejecutiva federal del PSOE, Pedro Bofill, manifestó que su partido cree que Benegas debe ser el próximo lendakari.

"No conozco ninguna propuesta del partido socialista", afirmó Arzalluz en declaraciones realizadas ayer en Bilbao. "Tanto en reuniones de las comisiones de ambos partidos como en encuentros más discretos con Benegas, lo único que han hecho los socialistas ha sido exhibir su programa. Nosotros podíamos haberles contestado recordándoles el nuestro, y así habríamos estado hasta el infinito". Por esa razón, según el líder nacionalista, el PNV ha presentado una propuesta por escrito y espera una respuesta concreta".Para Arzalluz, "corre por ahí la especie de que el PNV teme perder el Gobierno. La verdad es que la mayoría del partido piensa que en ningún caso se debe ir a una coalición sin unas bases de actuación muy asentadas, y, por tanto, lo que no vamos a hacer nunca es formar parte de un Gobierno que vaya con la piqueta destruyendo lo que hemos hecho". "Hay que tener en cuenta que nuestro programa ha sido el más votado", asegura Arzalluz. "Ha recibido 20.000 votos más que el de los socialistas, aunque tengan dos diputados más, y si alguien tiene que ceder en su programa son ellos. Nosotros estamos dispuestos a flexibilizar nuestras posiciones".

Temores a la radicalización

El líder del PNV subraya que "en la oposición siempre se es más radical, y fuera del Gobierno tendríamos menos ataduras que nos impidan sacar a la luz nuestras pretensiones de forma más descarnada; pero el que crea que vamos a herribatasunizarnos está también absolutamente equivocado". Según Arzalluz, gran parte del partido sentiría en la oposición cierto alivio, y tampoco existe temor a que el siguiente Ejecutivo investigue bajo las alfombras "Eso de las empresas del partido de las que hemos estado obteniendo beneficios son historias; si fuera verdad no tendríamos deudas", afirma.Arzalluz admite que la situación tras las elecciones autonómicas podía haber sido adecuada para replantear, cuestiones de fondo, como el rechazo del nacionalismo a la Constitución, e intentar una consideración global del problema vasco. "Yo lo he propuesto", dice, "pero a los socialistas no les interesa. Tienen la obsesión de ETA y de la violencia, y lo otro no les interesa porque creen que el nacionalismo nunca aceptará al Estado".

Por su parte, Benegas emplazó a Carlos Garaikoetxea para que "resuelva sus dudas" y decida si quiere gobernar con un programa de progreso, "como el que le hemos ofrecido y perfilado", dijo. En una nota difundida en Bilbao, Benegas replica a Garaikoetxea -que el viernes anunció su retirada de las conversaciones hasta que el PSE-PSOE garantice la negociación de compromisos de desarrollo autonómico- que no es el PSE-PSOE el llamado "a avanzar posiciones que corresponderían a una negociación entre el Gobierno vasco que se forme y el Gobierno de la nación", sino Garaikoetxea quien debe despejar las dudas sobre su voluntad de participar en un Ejecutivo junto a los socialistas.

Benegas afirma que con EA y EE ha alcanzado aproximaciones significativas sobre la crisis económica, la lucha contra el terrorismo o el marco institucional de la autonomía, mientras que con el PNV subsisten diferencias mucho más acusadas. Por primera vez señala Benegas que el mayor nivel de acercamiento programático con los partidos de Garaikoetxea y, Bandrés "permite decir que es con éstos con quienes parece darse más claramente la posibilidad de un cambio en la situación política". Asimismo, señala Benegas que la prioridad socialista es "culminar ese eje tripartito si se dieran las condiciones para ello".

Carlos Garaikoetxea replicó inmediatamente a Benegas desde Pamplona. "EA no tiene ninguna duda sobre el Gobierno que necesita Euskadi, y por eso elaboró en su día un programa mínimo, de todos conocido, sobre los problemas que hay que resolver". Sin embargo, "el partido socialista está todavía por presentar una sola propuesta escrita", según Garaikoetxea, por lo que su organización espera una respuesta concreta al emplazamiento para negociar compromisos sobre las transferencias pendientes y la política autonómica.

"Si no hay acuerdo, no será responsabilidad nuestra, sino del PSOE, que se niega a negociar en serio el desarrollo del estatuto", dijo Garaikoetxea. "Se puede pensar", añadió, "que en EA somos ingenuos, pero no tanto como para, a la luz de la experiencia, entrar en un Gobierno junto a los socialistas sin concretar compromisos, con la esperanza de que luego las cosas se vayan arreglando".