Enrique Barón hace oficial su candidatura a la presidencia del Parlamento Europeo
I. C., ENVIADO ESPECIAL, El eurodiputado socialista español Enrique Barón presentó ayer, en una conferencia de prensa en Estrasburgo, su candidatura a la presidencia del Parlamento Europeo, recalcando su "vocación europeísta" e insistiendo en que esa institución debe "seguir jugando un papel de fuerza motriz" en la construcción de la Unión Europea, aprovechando la inminente entrada en vigor del Acta Única.
Barón, de 44 años de edad, fue designado candidato a la presidencia por el Grupo Socialista, el más numeroso de la Asamblea, pero acaso no lo suficiente como para poder derrotar a finales de enero, cuando se celebre la elección, a su único adversario, el conservador británico sir Henry Plumb, que cuenta ya con el apoyo de los democristianos, gaullistas y probablemente de los liberales, que todavía no se han pronunciado públicamente.Preguntado sobre lo que pensaba hacer para intentar cosechar votos de otras formaciones, el ex ministro español de Transportes señaló que se habían "mantenido conversaciones con comunistas y el grupo Arco Iris" (ecologista), y que otros diputados socialistas llevaba n a cabo contactos con compatriotas suyos de otras nacionalidades. Barón dio a entender así que esperaba poder obtener los sufragios de parlamentarios de países del sur independientemente de su ideología.
La víspera de su encuentro con la Prensa, Barón participó en una cena-debate con su rival, Plumb, de 61 años de edad, en la que, en opinión de los aistentes, más que sobre las tradicionales diferencias políticas entre derecha e izquierda, los dos contrincantes polemizaron en torno a los objetivos de la construcción europea. Para el candidato británico, debe servir ante todo a la creación de un gran mercado interno mientras su interlocutor español insiste en la necesidad de promover la solidaridad entre ricos y pobres de la Comunidad Europea (CE).
La cohesión, como se llama a la solidaridad en la jerga comunitaria, es también defendida en un informe redactado por el eurodiputado socialista español Luis Planas sobre las consecuencias del Acta única para el Parlamento, que fue debatido ayer y que el pleno aprobará hoy jueves por la tarde. Firmada el pasado mes de febrero, esta nueva Carta Magna de la CE entrará en vigor en enero y, además de fijar el objetivo de crear en 1992 un gran mercado interior, incrementa el peso de la Asamblea de Estrasburgo, con la que el Consejo de ministros se verá obligado a cooperar más frecuentemente.
Tras resaltar que el Acta única no consagra la anhelada Unión Europea, Planas señala que es necesario pira el Parlamento "sacar todo el partido posible" del texto, y asegura que la instauración de la "cooperación" incitará a la Cámara a "una mayor disciplina en su trabajo", que deberá centrarse en asuntos capaces de influir concretamente en las sociedades, en vez de elaborar resoluciones generales.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.