Detenido el presunto dueño de una importante red de falsificación de musicasetes
Varios miles de cintas de casete, dos máquinas reproductoras, 17 logotipos de empresas discográficas legalmente establecidas y toda una larga serie de útiles e instrumentos para la falsificación han sido intervenidos en Madrid y en un pueblo de la provincia de Guadalajara por funcionarios del Grupo V de la Brigada de Policía Judicial. Los agentes han detenido a Angel Checa Martínez como presunto máximo responsable de este fraude.
Ángel Checa Martínez, al que la policía considera el presunto máximo responsable de este fraude a la propiedad intelectual, es natural de Millana (Guadalajara), tiene 45 años, y carecía de antecedentes policiales.También fue arrestado, pero quedó en libertad una vez prestada declaración, D. S. M., madrileño de 35 años, también sin antecedentes.
La policía destaca de este servicio el que, por primera vez en una operación antipiratería, han sido incautados logotipos de empresas legalmente establecidas, que sólo podían ser detectadas por expertos. En concreto, se trata de 17, seis de ellos correspondientes a CBS, otros tantos a Hispavox y cinco a Emi.
Las investigaciones se iniciaron hace dos meses y medio, al tenerse noticias de una red organizada de falsificación y distribución de musicasetes en todo el territorio nacional. El principal responsable fue identificado como Ángel Checa Martínez y sometido a estrecha vigilancia. Así se llegó a conocer que disponía de un local en la calle de San Claudio de Madrid y de un chalé en su pueblo de origen.
Dos arsenales
En el almacén de Madrid se encontraron unas 5.000 cintas ya falsificadas; 134 expositores; varios lotes de etiquetas, carátulas y pegatinas, así como numerosa documentación; entre ella, los listados con las rutas de distribución y venta.En la vivienda de Millana, los inspectores se incautaron de dos máquinas reproductoras que podían efectuar cinco copias simultáneas del master cada tres minutos; otra para envolver los estuches en celofán; una plancha para marcar los logotipos, unas 50.000 carátulas y etiquetas y 1.700 cintas, entre otras cosas.
El valor de lo incautado hasta ahora asciende a unos 14 millones de pesetas. Resta por evaluar el género instalado en los cientos de expositores repartidos en bares de las zonas donde actuaban.
De los albaranes hallados en poder del detenido parece deducirse que éste adquiría mensualmente unas 4.000 o 5.000 cintas vírgenes.
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