2.000 vecinos de Martos dicen ser autores del incendio de 30 viviendas gitanas
La denominada Coordinadora Cívica de Martos (Jaén) ha convocado para las once de esta mañana una manifestación y una huelga general de dos horas para intentar que no ingresen en prisión los dos únicos procesados por el incendio de 30 viviendas de familias gitanas el pasado 12 de julio, como ha decretado la Audiencia de Jaén. Unas 2.000 personas se concentraron el miércoles por la tarde frente al Ayuntamiento de Martos, que cuenta con una mayoría socialista, para autoinculparse por los mismos hechos. "Hemos sido todos", fue el grito más coreado durante la concentración.
Los dos procesados, Antonio Espejo Gay y Antonio Espejo Cañada, están hoy en libertad provisional, bajo fianza de 200.000 pesetas cada uno, por un auto dictado el 9 de septiembre por el en esa fecha juez de Martos, Moisés Lazúen, en la actualidad destinado en Barcelona. Ese auto fue revocado el martes pasado por la Audiencia de Jaén, que estimó así un recurso presentado por el fiscal y por el abogado de la acusación particular, Darío Fernández, conocido por su actuación como acusador privado en el caso Almería.Además, se da la circunstancia de que el miércoles tomó posesión como titular del Juzgado de Martos Jorge Ferrer, de 29 años, cuarto juez que se hace cargo del sumario en los últimos cuatro meses. El nuevo juez no había recibido ayer la notificación oficial de la Audiencia de Jaén, por lo que no pudo decretar el ingreso en prisión de los procesados.
Manifestación
Por otra parte, la Coordinadora Cívica va a presentar un recurso de súplica ante la Audiencia de Jaén. La coordinadora, integrada por representantes de los distintos barrios de Martos (localidad de unos 18.000 habitantes), acordó el miércoles convocar para hoy una manifestación y pedir el cierre de comercios, servicios, industrias y colegios "para que no ingresen en prisión los dos procesados", en lo que consideran como "un acto humanitario", según manifestó el presidente de la coordinadora, Julio Pulido.Los hechos que han dado origen al proceso se desencadenaron en la noche del pasado 12 de julio, después de que unos 200 vecinos incendiaran 30 viviendas de familias gitanas por la agresión de un gitano ebrio, Amador Cortés, el Lolo, a un payo, Francisco Expósito. Los vecinos de Martos han venido justificando desde entonces que esa acción se produjo porque ya habían sido robados, asaltados y amenazados en numerosas ocasiones y el pueblo vivía una situación de exasperación.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Gitanos
- Encierros
- Orden público
- Protestas sociales
- Ayuntamientos
- Provincia Jaén
- Comunidades autónomas
- Administración autonómica
- Seguridad ciudadana
- Administración local
- Malestar social
- Incendios
- Andalucía
- Accidentes
- Problemas sociales
- España
- Urbanismo
- Administración pública
- Sucesos
- Justicia
- Minorías raciales
- Minorías sociales
- Grupos sociales
- Sociedad