La Copa de Europa vuelve al Bernabéu tras cinco anos

La Copa de Europa vuelve al Bernabéu después de cinco años sin que este campo acogiera ningún encuentro, de la competición que hizo célebre al Real Madrid. El último fue la semifinal de la temporada 1980-1981, con victoria del Madrid sobre el Inter por 2-0. El visitante de esta noche (nueve de la noche) es el Young Boys, equipo en el que los madridistas no ven ningún escollo, a pesar de que trae de Berna la ventaja de un gol. Leo Bennhakker ha citado para este partido a Juanito y ha dejado fuera de la convocatoria al defensa Mino. Se espera que repita el equipo que ha ganado los dos últimos partidos.

Fundador de la Copa de Europa y ganador de las cinco primeras ediciones, el Madrid ha estado fuera de esta competición, la favorita de sus, aficionados, las cinco últimas temporadas. El hincha madridista ha soportado la nostalgia de este torneo gracias al brillante papel del equipo en la Copa de la UEFA, ganada en las dos últimas ediciones, pero ahora vuelca su ilusión en que La Quinta del Buitre consiga la Copa de Europa, como lo hicieron el equipo de Di Stéfano y la generación de los yeyés.El primer obstáculo es el Young Boys, de Berna, conjunto al que se supone el Madrid podrá ganar de forma contundente. El partido de ¡da se resolvió por 1-0 a favor del equipo suizo, gol marcado por Bamert, que además de anotarse este tanto le provocó al Madrid otro contratiempo: fue quien reveló a la prensa que en el vestuario madridista se había desencadenado una fenomenal bronca en el descanso.

Tras aquel partido, el Madrid parece haber entrado en muy buen camino. Ganó a domicilio al Betis, 2-6, y doblegó, con trabajo pero con buen juego, a la Real Sociedad por 1-0. Beenhakker tiene ya un equipo que parece fijo: Buyo (1); Chendo (2), Sanchis (5), Gallego (10), Camacho (3); Michel (8), Solana (4), Valdano (11), Gordillo (6); Butragueño (7) y Hugo Sánchez (9). Éstos parecen los seguros para hoy. Con ellos están concentrados Agustín, Martín Vázquez, Juanito y Pardeza. Queda fuera Mino, fichaje de este año y que parece descolgado del equipo.

El equipo suizo llegó a mediodía de ayer a Madrid, y anoche se entrenó en el Bernabéu para conocer la iluminación. Según explicó el entrenador suizo, su esperanza es aguantar el suficiente tiempo sin encajar un gol como para que el Madrid se descubra atrás; y poder sorprender en algún contraataque. El equipo probable es: Zurbuchen; Wittwer, Broennimann, Weber, Conz; Bamert, Jeitziner Gertschen, Prytz; Zuffi y Lunde

Mino

Mino se encuentra disgustado porque le hacía ilusión jugar su primer partido de Copa de Europa, y porque es la tercera vez consecutiva que no va concentrado y nadie le ha explicado por qué. "Ésta es una situación que no entiendo", afirma. "Me lo quiero tomar con tranquilidad pero seguir así no me interesa No me conformo con estar parado; si me hubiese quedado fuer del equipo por no jugar bien vale, pero lo que me disgusta es que me voy cayendo poco a poco de las listas y no sé por qué". El jugador quiere tomarse su nueva situación en el equipo a largo plazo y con tranquilidad: "Yo quiero jugar en el Madrid, porque sé que puedo hacerlo. Además tengo cuatro años de contrato con el club, pero lo que no quiero es estar sin jugar. Soy muy joven y mi carrera es lo más importante".

El central asturiano confiesa que le ha costado un poco adaptarse al Madrid: "Vengo de un equipo que juega más cerrado, y donde los defensas están más arropados" y confiesa que está deseando jugar con Maceda (ambos coincidieron en el Spórting). Mino cree que su exclusión de las listas se debe principalmente a la derrota frente al Dinamo de Kiev (en el trofeo Bernabéu), y no comparte las críticas a la defensa blanca. Mino declara que no tiene ningún problema con el entrenador. La polémica surgió a raíz de las declaraciones de Bennhakker, cuando éste, después del partido frente al Spórting, dijo que parecia que Mino siguiera jugando en el equipo asturianio.

"Es un tema", afirma el jugador, "que "aclaramos entre los dos y ha quedado zanjado"; y, que prefiere no recordar.

Para este encuentro, el Madrid ha establecido unos precios inferiores a los habituales en la competición europea: 400 pesetas la entrada más barata y 1.900 la más cara. No obstante, parece seguro que no habrá lleno. El partido será arbitrado por Josef Assenmacher, de la RFA.