Dirigentes palestinos declaran a Fernández Ordóñez que la OLP es su único representante
Una docena de alcaldes, universitarios y periodistas palestinos de los territorios ocupados por Israel en 1967 reafirmaron ayer al ministro español de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, que consideran a la Organización para Liberación de Palestina (OLP) el único representante de su pueblo. Este grupo de notables, que incluía a projordanos y arafatistas, fue considerado por el ministro de Exteriores como representativo de la opinión de los habitantes de Cisjordania y Gaza.
La reunión, que duró hora y media, se celebró en el Consulado General de España en Jerusalén, en el sector árabe de la ciudad, ocupado por Israel en 1967. El ministro llegó allí en un coche sin banderín español y sin protección oficial israelí, Pedro López de Aguirrebengoa, embajador en Tel Aviv, no le acompañó en esta ocasión, porque su jurisdicción se limita a las fronteras israelíes anteriores a la guerra de los seis días. El anfitrión fue el cónsul general Santiago Martínez Caro.Los asistentes más conocidos por la opinión pública internacional fueron Elías Freij, actual alcalde de Belén, y Mustafa Nashe y Rachid Chawd, depuestos alcaldes de Hebrón y Gaza, respectivamente. Al término de la reunión, sólo el alcalde de Belén conversó con la prensa. Agradeció que el ministro español hubiera defendido ante las autoridades israelíes el derecho palestino a la autodeterminación y la idea de celebrar una conferencia internacional de paz para Oriente Próximo. A la pregunta de quién debe representar a los palestinos en eventuales conversaciones de paz, Freij respondió: "La OLP".
Fernández Ordóñez confirmó después que todos sus interlocutores del consulado general, más allá de sus diferencias, habían considerado a la central palestina como la voz de los habitantes de Cisjordania y Gaza. El ministro dijo que habían hablado con "sensatez, moderación y amargura". "Todos ellos", añadió, "han lamentado la actual tendencia a considerar el problema de los territorios ocupados sólo desde su aspecto económico, de calidad de vida, presión fiscal y expropiaciones de tierras". "Han sido muy rotundos al afirmar que el problema es ante todo político y de dignidad".
Otro miembro de la delegación española añadió que los palestinos habían insistido en que esos territorios han sido ocupados militarmente y "por tanto se produce allí la máxima violación posible de los derechos humanos. Un asunto que no se resuelve con inversiones".
A primera hora de la mañana Fernández Ordóñez había recorrido a pie el casco antiguo de la ciudad de Jerusalén. Entró en la ciudad amurallada por la puerta de Damasco y se detuvo en los lugares sagrados de las tres grandes religiones monoteístas: el Santo Sepulcro, las mezquitas de la Roca y El Aqsa y el Muro de las Lamentaciones.
Más tarde visitó al presidente de la República de Israel, Chaim Herzog, y al ministro de Cultura, Isaac Navon. A este último, con el que conversó en español, le anunció su intención de crear un centro de cultura española en Israel. "Si no lo hace usted, lo haré yo", respondió Navon, conocido hispanófilo.
El ministro Francisco Fernández Ordóñez concluye hoy la primera visita de un miembro de un Gobierno español por Israel, con una excursión a un kibutz (granja) de Galilea.
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