_
_
_
_

1.000 pasteles con forma de panda, repartidos en el cuarto cumpleaños de 'Chu-Lin'

Unos 8.000 pasteles y una tarta de más de dos metros de diámetro y de altura fueron ayer el dulce de la fiesta que el Zoo de Madrid preparó para celebrar el cuarto cumpleaños de Chu-Lin, el panda madrileño, nacido el 4 de septiembre de 1982. La organización de empresarios de pastelería y confitería de Madrid corrió con los gastos de los 1.000 huevos, 350 kilos de harina, 225 de azúcar, 500 de mantequilla, 15 de cerezas confitadas y 50 de praliné de relleno que fueron utilizados para invitar a los miles de niños que acudieron a la fiesta.

Ocho personas de la Escuela de Pastelería de Madrid, dependiente de la citada organización trabajaron toda la semana pasada para organizar "algo excepcional", según palabras de Juan José Sierra, que lleva 25 años dedicado a la pastelería y que fue el encargado de que el convite estuviera en su punto. Para la ocasión se diseñó un molde especial para dar la forma de pan da al hojaldre de los pasteles Luego fueron rellenos de praliné de avellana y recubíertos con dos bandas de azúcar y una de caramelo."Es la primera vez que nos en cargan la fiesta de cumpleaños de Chu-Lin y la primera vez que se hacen pastelitos. Otros años sólo se había hecho una tarta", dice Juan José Sierra. "Es una pena que nos pille en una época en que apenas hay gente en la escuela, porque podíamos haber hecho también de chocolate la figura del panda que corona la gigantesca tarta".

6.500 niños

A las 11.30 todo estaba preparado. Varias casas comerciales habían donado alrededor de 400 regalos con que obsequiar a los niños, desde pandas de peluche o camisetas hasta bicicletas. Hacia las dos de la tarde ya habían pasado por el zoológico unos 5.000 niños acompañados de sus padres, y hacia las cinco de la tarde la cifra había ascendido según un portavoz del zoo, a los 6.500.Tras el corte de la monumental tarta comenzó el reparto de pastelillos y de obsequios entre los asistentes. Asimismo, a lo largo del día se celebraron varios sorteos de juguetes entre los pequeños que habían acudido al zoo.

El año pasado Chu-Lin no pudo celebrar su cumpleaños a causa de una diabetes insípida que le hizo perder 25 kilos, ya recuperados. El animal, que pesó 110 gramos al nacer, se ha convertido en un ejemplar que pesa actualmente 104 kilos. Precisamente con el fin de determinar la enfermedad padecida por el panda, Chu-Lin fue llevado entonces a la clínica Ruber, donde se le practicó un escáner.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_