Dos goles de Villa dieron la victoria al Spórtinq

El jugador más polémico de la temporada pasada, Manolo Sarabia, fue el primero en golpear el balón en la nueva Liga y lo hizo con poca fortuna. Al minuto su equipo ya había encajado un gol de Villa. Fue el primer tanto de una temporada en la que se verán muchos como éste. Un delantero hábil y listo ganó por la espalda a una defensa estática para arrancar sin oposición y recorrer 20 o 30 metros libres hacia la portería.Ese gol permitió al Spórting ratificar uno de los principios del fútbol actual, el que marca primero, si se defiende bien, ha dado un gran paso para el triunfo.

El nuevo Athlétic de Iríbar tuvo pocas ideas y menos fuerza para desarrollarlas. Jugó con un sistema demasiado clásico y muy estático que se vino totalmente abajo en la segunda parte. La delantera del Spórting, estrenada ayer, tuvo la movilidad suficiente para crear varias ocasiones claras de gol ante Biurrun. Villa, que estuvo cedido la pasada temporada al Sabadell, fue el triunfador de la noche. En realidad, jugó porque Eloy estaba renqueante y Novoa no se atrevió a alinearle por temor a que se acabara de romper. Lo dejó en el banquillo por si acaso, pero no hizo falta porque junto a Villa estaba Flores, un mexicano con imaginación y buenas ideas que el público gijonés ya ha advertido.

Novoa, pues, se había visto obligado a formar un ataque desconocido y ésa fue su gran ventaja porque el Athlétic no fue capaz de frenar a los gijoneses. También es verdad que Ablanedo II sigue como siempre. Realizó dos intervenciones, una en la primera parte, a remate de cabeza de Sarabia a bocajarro, y otra en la segunda, a disparo lejano de Gallego, que le valieron ovaciones casi tan cerradas como las que recibió Villa después de los dos goles.

Al Atlétic se le vio cohibido. Careció de la garra de los últimos años, no presionó y sus líneas no se apoyaron unas a otras.