La travesía del desierto del SPD
LE MONDE( ... ) A cinco meses de la renovación del Bundestag, la socialdemocracia alemana ha comenzado en Nuremberg un díficil congreso. Obligado a demostrar que es el único capaz de representar, esto es, sin los verdes, una solución de recambio al poder actualmente asentado en Bonn, el Partido Socialdemócrata conseguiría un éxito si sólo llegase a hacer creer a la opinión pública de la República Federal de Alemania que el propio partido está convencido de ello. Y es que la aritmética electoral es implacable: cuentan con el 40% de la intención de voto en los sondeos, y sin aliados posibles.Sin embargo, había corrido un viento de euforia en las filas socialdemócratas tras la victoria de Johannes Rau en las elecciones regionales de Renania-Westfalia, victoria que le valió el ser designado candidato del partido a la Cancillería de Bonn. ( ... ) Pero, por primera vez este verano, la cota de Rau ha sido inferior a la de un canciller que jamás hubiera obtenido espléndidos índices de popularidad.
Los socialdemócratas han descubierto, por otra parte, que la muy viva sensibilidad de sus conciudadanos en cuanto a cuestiones relativas a la defensa del medio ambiente no les resultaba rentable, electoralmente hablando. ( ... ) El SPD no había zanjado claramente la cuestión de sus relaciones con los verdes, y los democristianos experimentaron un avance en las elecciones de Baja Sajonia.
( ... ) El ala derecha del partido, muy discreta desde el abandono por Helmut Schmidt de la Cancillería en 1982, continúa sólidamente implantada, especialmente en el movimiento sindical. Los sondeos así lo confirman: el SPD tiene más que ganar del electorado moderado que aproximándose a los verdes, y así lo sabe Rau, quien se ha propuesto como objetivo la conquista del centro. Pero aún no se ha realizado la necesaria síntesis entre el ala derecha, pragmática, y las nuevas aspiraciones que han aparecido en los últimos tiempos, especialmente en materia de seguridad y de protección del medio ambiente.
Esta dificultad en conseguir la integración de forma creíble entre corrientes a menudo contradictorias sigue siendo el principal obstáculo del Partido Socialdemócrata alemán, en un momento en que la política gubernamental comienza a dar sus frutos
, 26 de agosto
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