Comunidad de Madrid
La batalla por Madrid ha sido en las recientes elecciones generales una de, las más duras y más reñidas del mapa electoral. El resultado de ella ha sido un acercamiento de las posiciones entre el PSOE y CP, una notable subida del CDS y un leve aumento de los votos de IU y de la MUC con respecto a 1982. Veámoslo en el cuadro que recoge los porcentajes sobre el total de votantes y sobre el censo, obtenidos por los distintos partidos en tres momentos electorales.
Hay que decir, en primer lugar, que en Madrid el PSOE ha obtenido su máxima pérdida (le votos de entre todas las comunidades autónomas, seguida, en este ranking, por Asturias. Si el PSOE ha perdido en toda España el 12,2% de los votos que tenía en 1982, en Madrid ha perdido el 26,5%. O, dicho de otra manera, el 29,6% de todos los votos perdidos por él PSOE en 1986 respecto a 1982, los ha perdido la comunidad autónoma madrileña.El estudio de a dónde han podido ir a parar estos votos es complicado, y exige la publicación de sondeos poselectorales, extremo éste que aún no se ha producido. No obstante, sí que podemos señalar que la pérdida fundamental de votos del PSOE ya se produjo en las elecciones autonómicas de 1983, yendo entonces a engrosar, por un lado, los votos del PCE, que obtuvo 71.000 votos más que en las generales de 1982 y, por otro, a la abstención.
Por otro lado, CP ha perdido en Madrid unos 69.000 votos respecto al 1982, y hay que recordar que UCD obtuvo 91.000 en aquella ocasión electoral. Es presumible que una parte considerable de estos votos ha ido a parar a las filas del CDS y a los menguados votos del PRD. Pero aun así es evidente que del cuarto de millón de votos ganados por este partido en la comunidad autónoma que nos ocupa, una parte sustancial procede del PSOE. Esta situación, que no es idéntica en otras comunidades autónomas, como veremos en sucesivos artículos, se aclara más al estudiar lo sucedido en el municipio de Madrid y en el área metropolitana.
Como resumen del análisis de los trasvases de votos en los tres momentos electorales mencionados, podemos sentar la. hipótesis de que un 34% de los votos perdidos por el PSOE en Madrid han ido a parar al CDS; un 22%, a IU o al MUC y el otro 44% a la abstención.
Conviene subrayar el hecho de que el electorado madrileño ha tenido un comportamiento menos abstencionista que el del conjunto del Estado, situándose el porcentaje de abstención en Madrid 2,3 puntos por debajo del nacional.
Ese mismo electorado ha decidido castigar fuertemente al PSOE, pero esa situación ya estaba cantada en las elecciones autonómicas de 1983, y claramente anunciada en el referéndum sobre la OTAN, en el que Madrid fue una de las comunidades autónomas con menor diferencia entre los síes y los noes. Pero ese conjunto de electores descontentos ha preferido abstenerse o votar al CDS, más que dirigir sus preferencias a la izquierda del PSOE.
Por otra parte, es evidente que CP alcanzó su techo electoral en Madrid en 1982, y desde entonces no hace sino bajar.
Es en el municipio de la capital donde se han producido las mayores pérdidas del PSOE: el 29,7% de: los votos que tenía en 1982, pérdida pues superior a la del conjunto de la comunidad. Lo contrario ocurre con CP, que si en toda - la comunidad autónoma ha perdido el 7,7% de sus votos, en la capital sólo ha perdido el 6,5%.
El CDS, sin embargo, ha ganado más votos fuera de la capital que en ella, puesto que si en toda la comunidad autónoma ha ganado un 224,9% de los votos que tenía en 1982, en la capital sólo ha ganado un 178%. Izquierda Unida sitúa sus ganancias en la capital prácticamente al mismo nivel que en la comunidad autónoma.
Trasvase de votos
Teniendo en cuenta todo ello y subrayando además que el PRD ha obtenido casi todos sus votos en la capital, y que UCD, en 1982, también concentraba casi todos sus votos en ella, podemos decir que los trasvases de votos en la capital han sido distintos que en el conjunto de la comunidad. Utilizando los mismos criterios que anteriormente, diremos, también como hipótesis, que el 23% de los votos perdidos por el PSOE respecto a 1982 han ido a parar al CDS, un 19% a IU y/o al MUC, y un 58% a la abstención.
Conviene subrayar que la abstención en Madrid capital ha sido superior a la media de la comunidad: un 27,3%.
Finalmente, diremos que en Madrid capital es mínima la diferencia que separa al PSOE de CP, consecuencia directa de las graves pérdidas del PSOE en el período mencionado. La situación puede ser muy reñida en las próximas elecciones municipales, sobre todo si se tiene en cuenta que en la capital el voto en las pasadas elecciones autonómicas fue casi idéntico al que se produjo en las municipales de la misma fecha.
Además de la capital, la Comunidad de Madrid cuenta con 10 municipios cuyas poblaciones superan los 50.000 habitantes: Alcalá de Henares, Alcobendas, Alcorcón, Coslada, Fuenlabrada, Getafe, Leganés, Móstoles, Parla y Torrejón. Y a ellos nos referiremos en este apartado.
El nivel de participación-abstención en las elecciones del 22 de junio ha variado de unos municipios a otros, con diferencias cercanas a los ocho puntos; las localidades que aparecen con valores extremos son: Getafe, que, con una abstención del 23,4%, es el municipio más participativo de este grupo. A Fuenlabrada le correspondió la abstención más elevada, con un 3 1,1 %.
Indices de abstenciónDado que el índice de abstención del conjunto de la Comunidad de Madrid fue de un 26,9%, los 10 municipios mayores de 50.000 habitantes podríamos dividirlos en dos grupos de cinco, en función de que sus índices de abstención respectivos queden situados por encima o debajo de la cota de la comunidad.
En el primer grupo (los de mayor abstención) se encuentran: Alcalá de Henares, Fuenlabrada, Móstoles, Parla y Torrejón. El grupo de los más participativos lo
forman: Alcobendas, Alcorcón, Coslada, Getafe y Leganés.
Los resultados obtenidos por los partidos parlamentarios en estos 10 municipios, aun manteniéndose dentro de la tónica general apreciada para el conjunto de la comunidad en cuanto a la posición obtenida por cada uno, difieren sensiblemente al comparar los valores porcentuales respectivos. Así, podemos observar que el PSOE, además de situarse como primer partido local, con valores superiores al 45% -su inmediato seguidor, CP, aparece a una distancia de más de 20 puntos-, ha superado la mayoría absoluta en: Coslada (52,6%), Fuenlabrada (56,9%), Leganés (53,4%), Parla (55,9%) y Torrejón (53,2%).
Comparando los resultados de los socialistas en las elecciones generales de 1986, con las respectivas de 1982 y autonómicas de 1983, en los 10 municipios mayores de 50.000 habitantes, las pérdidas son iguales o superiores, en algunos casos, comparadas, con la del conjunto de la comunidad.
La diferencia fundamental estriba en lo elevado de los porcentajes socialistas en 1982 y 1983, en estas localidades; en todas ellas habían superado el 58%, llegando hasta el 71 % en Parla, en las generales de 1982; en las autonómicas de 1983 mantuvieron proporciones similares a las de 1982, excepto en Coslada, municipio con alcalde comunista, donde descendieron 20 puntos y perdieron la mayoría absoluta.
La proporción de votos perdidos por el PSOE entre 1982 y 1986, que en el conjunto de la comunidad ha sido de un 26,5%, en 7 de las 10 localidades ha sido inferior a esa media, pero se rebasó en: Alcorcón (27,3%), Getafe (26,9%) y Parla (30,6%). Este último municipio ha dado la máxima pérdida porcentual de votos del PSOE del conjunto del área metropolitana funcional. En valores absolutos, la mayor pérdida ha correspondido a Leganés, con algo más de 15.000 votos.
El menor descenso de votos socialista, entre 1982 y 1986, se ha producido en Fuenlabrada, con una pérdida del 5,1 % de los votos de 1982.
La Coalición Popular, en estas últimas elecciones, al igual que en 1982 y 1983, en estos municipios obtiene porcentajes inferiores al de la comunidad (31,5%). En la mayoría ha retrocedido electoralmente en todos los casos con respecto a 1982; respecto a las autonómicas, en las que ya había perdido electorado, tan sólo sube unas décimas en Alcorcón, Coslada, Leganés, Móstoles y Parla; en los restantes ha descendido. Los porcentajes obtenidos por la Coalición Popular el 22 de junio se han situado entre el 12,6% de Coslada y el 25,1 % de Alcobendas. Pero
Comunidad de Madrid
tan sólo superaba el 20% en Alcalá de Henares (20,2%), Alcobendas (indicado) y Alcorcón (22,7%).El CDS ha sido el único partido con incrementos sustanciales de voto en los grandes municipios, en mayor medida que en la Comunidad de Madrid, con proporciones superiores al 300%. Ha sido el segundo partido más votado, por delante de CP, en Coslada y Leganés. Y el tercero, en las ocho localidades restantes. Los valores porcentuales se han situado entre el 12,4%, de la localidad de Parla y el 18,2'% de Alcorcón.
Liadas las variaciones de voto de los distintos partidos, en los municipios mayores de 50.000 habitantes y en la mayoría del área metropolitana, parece que el trasvase de voto socialista de 1982 al CDS en 1986 se ha podido, dar en mayor medida que: en la capital y en el conjunto de la comunidad. Es decir, más; del 50% de las ganancias del CDS provienen, de las pérdidas socialistas.
Otra gran parte del incremento de voto del CDS sin duda debe provenir de los nuevos electores, atraídos por la propuesta de la reducción del servicio militar obligatorio.
Voto colmunista
La coalición Izquierda Unida apenas ha variado los porcentajes del PCE en 1.982 y sí una reducción sensible respecto de los resultados de las autonómicas.
Fin algunos casos sumados a Izquierda Unida, los resultados de la Mesa para la Unidad de los Comunistas, se alcanza la cota del PCE en 19113, y se supera, lógicamente, la de 1982.
De ello se deduce que el conjunto de las opciones comumistas más algunos agregados no lograron recuperarse del descalabre, de 1982, ni en sus potenciales zonas más favorables, como pudieran ser estos grandes municipios, en los que reside una gran parte del proletariado industrial, de los, que no quedan excluidos los; que cuentan con alcalde comunista (Coslada, Pinto y San Fernando de Henares).
En resumen, el PSOE ha sufrido grandes pérdidas de voto, que en una gran parte han tenido como destinatario el CDS, como forma de ejercitar el voto de castigo y devolución de voto centrista; otra parte se ha ido a la abstención y una escasísima proporción de las opciones a su izquierda. En este caso, el llamado voto de castigo habría que suponerlo hacia el partido que gobierna en Iodos los ámbitos: central, autonómico y, en la mayoría de los casos, local.
La Coalición Popular no sólo ha tocado techo, sino que pierde influencia. El CDS es el gran triunfador, pero necesitará consolidarse como partido de oposición para no ser flor de un día. Y los comunistas apenas se recuperan.
Finalmente, señalaremos que, a pesar de las pérdidas socialistas, la izquierda continúa siendo mayoritaria en los grandes municipios y en el área metropolitana de Madrid, aunque ha disminuido la distancia respecto a la suma de centro y derecha.
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