Ramón Mendoza afirma que Nicoláu Casaus practica "terrorismo informativo"
Ramón Mendoza, presidente del Real Madrid, afirmó ayer que el vicepresidente del Barcelona Nicoláu Casaus ha practicado un "bochornoso terrorismo informativo verbal" y añadió que se hacía necesario "desenmascarar a quienes pretenden tapar sus incapacidades con la excusa del Madrid". Casaus afirmó en un diario deportivo catalán que Mendoza, Schuster, el periodista José María García y el cuñado de éste, Alfredo Fraile, habían comido juntos para "desestabilizar al Barcelona". Mendoza indicó que los servicios jurídicos del Madrid estudian la adopción de medidas legales contra Casaus.
La información sobre esa supuesta comida fue ofrecida y ratificada personalmente por Nicoláu Casaus al diario Sport "con los pelos y señales aportados por un camarero, catalán, simpatizante del Barça, que trabaja en el restaurante donde se llevó a cabo esta, reunión", según aseguró el vicepresidente barcelonista." Al llegar a casa hoy, he recibido la llamada de un camarero que decía ser simpatizante del Madrid y que me indicó que no hiciera caso a lo que dice Casaus porque es un empleado a sueldo del Barcelona y está queriendo justificar la política interior de su club de esta forma. Le he colgado inmediatamente. Yo esas cosas no las puedo creer. Eran unas afirmaciones las de este camarero intolerables". Así comenzó Mendoza la conferencia informativa que concedió en la sede del club para exponer la posición del Madrid en torno a este asunto.
El presidente del Real Madrid mantuvo siempre el mismo tono de dureza irónica en lo que calificó como "la batalla de los. camareros". Y añadió: "Es una pena porque el gremio de los camareros es bastante más serio que todo esto y Casaus lo único que va a conseguir es que cada vez haya más camareros madridistas. Además, ahora mismo no sé si el que llamó a Casaus era camarero, barcelonísta o un doble agente y ha sido el mismo que me ha llamado esta mañana".
Mendoza explicó que se había enviado una carta a la Liga Profesional de Clubes y otra a la Federación Española -"de la que el presidente del Barcelona y del venerable ciudadano Casaus, señor Núñez, es vicepresidente", recalcó Mendoza- denunciando "esta intromisión intolerable", aunque Mendoza admitió que "esto sirve de muy poco".
"El Madrid", prosiguió", "no está dispuesto a poner una mejilla, o dos, ni siquiera media, para sevir como excusa a determinadas actitudes que sólo sirven para generar un estado de violencia. Y esto, cuando va a in¡ciarse una nueva competición de Liga, es algo que conviene atajar cuanto antes".
Afición honesta
Mendoza se puso más serio cuando dijo: "El Madrid no ha tenido nunca ningún con tacto con el jugador Schuster ni, por supuesto, ha existido esa comida a la que alude el ciudadano Casaus. Y yo les pido a todos que ayuden a desenmascarar este estado de cosas. Tienen la obligación moral de hacerlo. Y lo digo sobre todo por una afición honesta, como la del Barcelona, que tiene que soportar a veces estas conductas extrañas. Porque es muy fácil que un vicepresidente de una entidad manipule a una masa social tan importante como la azulgrana, una afición desengañada posiblemente por motivos deportivos, en los que yo, desde luego, no voy a entrar".
"Además", añadió Mendoza, "que se aclaren. Han dicho que Schuster tiene problemas psíquicos y ahora resulta que la mano negra del Barcelona, como siempre, es blanca".
Aún tuvo tiempo Mendoza para lanzar otra andanada cuando presentó la próxima edición del trofeo Bernabéu, que se jugará los días 26 y 27, con la presencia del Anderlecht, el Dinamo de Kiev y el Steaua de Bucarest. De éste último, campeón de Europa -derrotó en la final de Sevilla al Barcelona en los lanzamientos de penaltis, tras acabar el partido con empate a cero-, Mendoza dijo: "Puedo asegurarles que 24 horas antes de aquel día el Steaua ya estaba contratado, independientemente del resultado que se diese 24 horas después. Claro que, tal como están las cosas, a lo mejor Nicoláu Casaus puede pensar que por ahí vino el gafe de la derrota de aquel día. Una derrota que, naturalmente, todos sentimos mucho como españoles".
El Madrid envió también a la Federación Española de Fútbol el informe médico del club sobre las lesiones de Maceda y Gordillo en el Mundial 86, informe que no deja en buen lugar al médico de la selección nacional Jorge Guillén. Mendoza afirmó que el Madrid no ha pedido el cambio del doctor Guillén -"cada organismo tiene el médico que se merece y todos nos merecen mucho respeto"-.
En el informe se hace mención a que Maceda jugó antes del Mundial seis partidos oficiales sin ningún problema y Mendoza se preguntó ayer: "¿Cómo es posible que se le extrajera líquido de la rodilla sin consultar a los médicos del club? ¿Y cómo a Gordillo, que jugó antes del Mundial 13 partidos después de su lesión, no se le descubrió la fractura de peroné hasta que llegó a Madrid, pese a las radiografías hechas en México y a que el mísmo, jugador insistía que el dolor en esa zona era evidente"?
En el informe se señala, textualmente, lo siguiente en torno a la situación física de Maceda: "Las consecuencias médicas de la rodilla del jugador son imprevisibles, pudiendo acabar en una lesión importante". También se critica "la sorpresa y el desagrado del Madrid cuando comprobó que un informe médico confidencial era, vulnerando toda deontología tanto médica como deportiva y humana, divulgado por una emisora y un diario deportivo.
Responsabilidad federativa
El informe concluye así: "Es evidente que los servicios médicos del club son ajenos a las lesiones producidas en México, siendo responsabilidad directa de la Real Federación Española de Fútbol. Es improcedente que un equipo que cede siete jugadores a la selección no reciba ninguna información sobre los mismos en una competición tan larga e importante".
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