Inundaciones en Australia.
El primer ministro de Australia, Bob Hawke, contempla desde un helicóptero los suburbios inundados de Sydney, durante un vuelo sobre la zona. Seis personas murieron y miles tuvieron que abandonar sus casas después de tres días de lluvias torrenciales. Desde que comenzara la tormenta el pasado lunes, han caído -tras seis meses de sequía- un total de 446 litros de agua por metro cuadrado, que han ocasionando 60 millones de dólares (unos 8.100 millones de pesetas) en pérdidas.
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