Convergencia juzga un "rechazó" a su plan de colaboración el fracaso del PRD
La dirección de Convergéncia Democrática de Catalunya (CDC) ha calificado la derrota del Partido Reformista Democrático (PRD), formación que presentó como cándidato a la presidencia a Miquel Roca, secretario general por delegación de CDC, de "claro rechazo a la propuesta de colaboración" formulada por el partido nacionalista. El comité ejecutivo del partido de Jordi Pujol reafirmó la solidaridad con el PRD" y la voluntad de seguir actuando en la política española, aunque también ha consolidado la estrategia del paulatino y discreto distanciamiento del reformismo, iniciada la misma noche electoral. La cúpula de CDC expresó su apoyo unánime a Roca, en su reaparición, tras una semana de descanso y reflexión en solitario.Según la nota oficial de la reunión de la ejecutiva de CDC, celebrada en la noche dellunes, a las pocas horas de ser conocida la decisión de los fiscales del caso Banca Catalana de solicitar el procesamiento de Pujol y otras 17 personas, la propuesta reformista "era necesaria y positiva, desde una perspectiva global española". En consonancia con la utilización del tiempo pasado para referirse al reformismo, algunos dirigentes en privado y otros en público, entre estos el conseller de Agricultura, Josep Miró, estrechamente vinculado a Pujol, expresan su opinión de que el reformismo "ha de crecer solo, por él mismo".
El próximo domingo, el Consell Nacional de CDC, máximo órgano entre congresos, afrontará el análisis electoral iniciado por la dirección, análisis que ésta compatibiliza con la decisión sobre la organización de sus grupos parlamentarios. Mientras en el caso del Senado está decidido que el portavoz sea Ramón Trias, en el Congreso se mantiene la incógnita sobre el protagonismo de Roca en la próxima legislatura, bien como portavoz, bien como presidente de la Minoría Catalana, en cuyo caso sería sustituido por Maciá Alavedra como portavoz.
También los socialistas catalanes reúnen el próximo fin de semana a su Consell Nacional para estudiar la estrategia inmediata. El PSC considera que CDC ha tocado techo en unas elecciones legislativas, pero se prepara para librar la batalla de Barcelona en las inmínentes elecciones municipales.
El PSUC y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) viven momentos de crisis. Los comunistas decidirán también este fin de semana los cambios en la dirección, después de que varios miembros de la misma presentaran su dimisión al conocerse los resultados electorales. En una situación similar se debate ERC. El ex diputado Francesc Vicens, que no consiguió la renovación de su escaño, fue el primero en criticar abiertamente a la cúpula de su partido, especialmente por su participación como socio minoritario de CiU en el Gobierno de la Generalitat, lo que, a su jucio, perjudicó sus posiciones electorales. Poco después, el secretario general, Heribert Barrera, anunció su decisión de abandonar el cargo. Tras rechazarse la convocatoria de un congreso extraordinario, el Consell Nacional de los republicanos catalanes afrontará la crisis la próxima semana.
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