El INI destinará 3.000 millones de pesetas a sanear MADE, antigua filial de Seat
El Instituto Nacional de Industria (INI) ha aprobado un plan industrial para su filial Material Auxiliar de Electrificaciones (MADE), por el que inyectará en la división de forja de la empresa unos 3.000 millones de pesetas, de los que 1.100 millones se destinarán a la construcción de una nueva planta en Villalba (Madrid). El INI, que se hizo cargo del 68% de MADE tras la compra de Seat por Volkswagen, había condicionado la materialización de estas ayudas a la consecución de un acuerdo laboral, firmado en la primera semana, del presente mes de junio.
Este plan no anula la intención del INI de proceder a la reprivatización de la empresa, al tiempo que permitirá, en el plazo de los dos próximos años, sanear su deteriorada situación financiera, que se ha visto fuertemente resentida por el retraso -superior a un año- en la aprobación de este plan industrial. En el pasado ejercicio, la antigua filial de Seat registró unas pérdidas de unos 2.000 millones de pesetas -la facturación sobrepasó los 3.500 millones-, de los que aproximadamente la mitad correspondió a saneamiento de balances anteriores. Las deudas de la empresa no vinculadas a la explotación rondan los 3.000 millones de pesetas. Por otra parte, en los próximos meses se procederá a desgajar la sociedad en dos empresas con personalidad jurídica independiente: una centrada en la actividad eléctrica, que podría quedar vinculada a la Empresa Nacional de Electricidad (ENDESA) -participa en el capital social de MADE con un 30%-, y la de forja, que el INI pretende reprivatizar.Además de la construcción de una nueva planta, que estará concluida a primeros del próximo año, en la que se invertirán 1.100 millones de pesetas, el plan industrial contempla un incremento de la producción desde las 15.000 toneladas / año actuales a 19.400 toneladas. La capacidad de producción se ajusta a los planes iniciales, pero no así el alcance económico del proyecto, que preveía, entre saneamiento e inversiones un desembolso de unos 5.000 millones de pesetas.
Acuerdo laboral
El acuerdo laboral, ratificado mayoritariamente por los trabajadores en la primera semana de junio, contempla una reducción de plantilla en la actividad de forja hasta finales de 1988, de forma no traumática, de unos 200 trabajadores, con lo que la plantilla final quedará ajustada en torno a los 500 trabajadores. También se contemplan diversas regulaciones temporales de empleo en los dos próximos años.El convenio fijado supone un incremento salarial de un 7,5% en 1986, un 102% del índice de precios al consumo (IPC) en 1987 y de un 106% del IPC en el último año de vigencia del acuerdo. La jornada se reducirá desde las 1.800 horas / año actuales a 1.768 a finales de 1988. Por otra parte, se ha acordado una nueva organización de trabajo, con medidas de mejora de productividad y adaptación a las nuevas tecnologías que se van a incorporar.
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