El toque de balón
El verbo tocar es de antiguo uso en fútbol. Tocar el balón significa golpearlo con tacto. Tener buen toque un jugador significa tener buen temple para desplazar el balón a medías o largas distancias.Pero, de un tiempo a esta parte, este verbo ha adquirido un nuevo uso en fútbol, un uso que se hace fundamental para explicar el juego de hoy. Ya no sólo tocan los futbolistas, ahora tocan también los equipos.
Tocar, en esta nueva acepción colectiva, supone controlar el balón, ser propietario de, él e intercambiar su propiedad en el medio campo entre varios jugadores de un mismo equipo. El equipo que va hacia adelante tocando pretende hacer unos ataques pausados, sin arriesgar la posesión del balón, sin exponerse a un contraataque brusco, y procura jugar con la paciencia del contrario, cuya salida del fondo de su defensa procura provocar con el continuo intercambio del balón entre unos pies y otros. Cuando se produzca esta reacción de impaciencia, el equipo que defiende abrirá huecos atrás, que podrán ser aprovechados con un pase oportuno para crear una situación de gol.
Jugar tocando fue lo que hizo, mejor que nadie, Italia en los dos últimos campeonatos mundiales de fútbol y, lo que vuelve a hacer en éste. En México muchos equipos van a jugar tocando porque ese estilo de juego supone una economía de esfuerzo físico que se impone ante las condiciones de México, que desgastan más las energías del jugador por el calor y la altitud, a las que no están acostumbrados los jugadores europeos de las selecciones mundialistas.
Jugar tocando exige, obviamente, contar con jugadores de buena técnica individual y con un buen sentido del apoyo entre compañeros. Uno solo que controle mal el balón empezaría a ser objeto de persecución especial por parte del contrario y se convertiría en una fuente de pérdidas del balón. El continuo desmarque en apoyo al que tiene el balón para ofrecerle posibilidades de salida es igualmente fundamental.
Los equipos que tocan bien cuentan con gran ventaja para jugar con el marcador a su favor. Cuando Van por delante en el tanteo, pueden tocar en su propio campo, sin necesidad de ir al campo contrario. Con ello fuerzan al otro equipo a salir y abrir huecos a su espalda.
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