La caída de los crudos reduce en un 80% la entrada de divisas en Argelia

El Gobierno argelino reafirmé ayer su determinación de continuar subvencionando los productos de primera necesidad y solicitó una mayor disciplina a la población para paliar los efectos de la crisis económica.Argelia ha visto reducido en un 80% sus entradas en divisas a con3ecuencia de la bajada de los precios del petróleo, producto que financia más del 90% de sus importaciones en bienes de consumo. La interrupción momentánea de las importaciones de café generó la semana pasada el pánico en la población de la capital argelina, quien tomó por asalto, literalmente, los comercios. privados dónde aún se vendía el precioso grano. Café, té y azúcar constituyen productos de gran consumo en el mundo árabe, con cuotas que superan los 80 kilos anuales per cápita.

Medidas Impopulares

La semana anterior, las autoridades del país norteafricano decidieron aumentar de uno a dos años la autorización para comprar divisas, por un montante equivalente a 1.000 dinares (unas 32.000 pesetas), para viajes turísticos. Pero los menores de 18 años ni siquiera podrán disponer de esta cantidad de dinero en divisas para viajar a otros países.Los dirigentes argelinos admiten que esas primeras medidas restrictivas son impopulares, pero estiman que no afectarán de forma grave al nivel de vida de una población a la que tratan de sensibilizar políticamente de que debe entender que ha pasado la época de las vacas gordas. La actual situación de los crudos a nivel internacional ha provocado también que el Gobierno haya tenido, que variar su consigna oficial, que ahora es "contar únicamente con nuestros propios medios".

En un reciente discurso, el presidente argelino, Chadli Benyedid, aseguró que su país tiene la capacidad de neutralizar los efectos negativos de la crisis e hizo hincapié en la excelente salud financiera de Argelia, así como en el sentido de responsabilidad de sus compatriotas. La tensión social puede verse acentuada a causa de la proximidad del mes del ayuno islámico, el Ramadán, que comenzará a principios de mayo.