Suráfrica levanta el estado de emergencia y libera a más de 300 detenidos negros

Más de 300 detenidos negros fueron excarcelados ayer cuando el Gobierno de Suráfrica levantó el estado de emergencia impuesto en varias zonas del país hace siete meses. La medida pone fin a algunas restricciones contra la Prensa. Sin embargo, el Ejecutivo ordenó la expulsión de tres periodistas de la cadena de televisión norteamericana CBS.

La mayor parte de los detenidos fueron liberados en las primeras horas de ayer, y un portavoz del Ministerio de Ley y Orden confirmó que ya no quedaban presos detenidos en virtud de los poderes especiales del estado de emergencia. Añadió, sin embargo, que otras 327 personas seguían detenidas aún, por aplicación de las leyes normales.Varios países, entre ellos Estados Unidos, pidieron que se levantara el estado de emergencia como un primer paso para entablar negociaciones con los dirigentes negros a fin de conseguir reformas y una reducción de la violencia.

Ismail Momoniat, un político opositor de raza indio que fue encarcelado durante los 230 días que duró el estado de emergencia, declaró ayer al recuperar su libertad que sólo había sido interrogado una vez. "Nuestra detención fue un intento de sofocar la legítima oposición parlamentaria", afirmó. Murphy Morobe, portavoz del disidente Frente Unido Democrático (UDF), que con sus dos millones de miembros es, el bloque de oposicién más poderoso del país, fue liberado a primeras horas de la madrugada y fae objeto de un masivo recibimiento en su oficina, que pisó por primeria vez desde el 22 de enero.

Helen Suzman, portavoz para temas de justicia de la oposición parlamentaria, opinó que, a pesar de la suspensión, la policía seguirá utilizando poderes extraordinarios de detención.

Las medidas de excepción -que suspendieron la vigente legislación y silenciaron en gran medida a los medios de comunicación- se impusieron el 21 de julio en 23 distritos del país, principalmente habitados por negros. Se intentaba sofocar así la violencia, que tenía sus raíces en el aumento de los alquileres y el desencanto generalizado por la rnarginación política de los negros. Aproximadamente 8.000 personas, negros en su inmensa mayoría, fueron detenidas durante este período, y más de 700 murieron, según el Instituto de Relaciones Raciales.

Periodistas sancionados

El levantamiento del estado de emergencia termina con la restricción al trabajo de fotógrafos y operadores de televisión de entrar en los barrios negros. Sin embargo, el Gobierno ordenó ayer la expulsión de tres periodistas de la cadena norteamericana de televísión CBS por haber filmado el miércoles unos funerales en el barrio negro de Alexandra, en las afuras de Johanesburgo. Las autoridades consideraron la presencia de la CBS "un desprecio flagrante" de las limitaciones impuestas.Según el ministro del Interior, los tres periodistas -un norteamericano, un canadiense y un holandés- podrán recurrir contra la expulsión, que entrará en vigor el próximo martes. Es la primera expulsión de periodistas extranjeros desde hace cinco ineses.

Varios expertos declararon ayer a la agencia Reuter que el Gobierno utilitzará otras imedidas ya vigentes para limitar las actividades de la Prensa. El Gobierno culpa a los medios de comunicación extranjeros de la mala imagen de Suráfrica, que ha provocado sanciones económicas contra Pretoria y la suspensión de algunos créditos bancarios.