Polémica entre los Gobiernos aragonés y catalán sobre el agua del Ebro
El consejero de Presidencia del Gobierno aragonés, Andrés Cuartero, declaró ayer, en una rueda de prensa: ningún trasvase del Ebro "nos privará, ni en el presente ni en el futuro, de las aguas que necesitamos para nuestros regadíos", en respuesta a unas afirmaciones de Jordi Pujol, presidente de la Generalitat de Cataluña, en las que aseguraba que "el 30% del agua del Ebro es catalana".Jordi Pujol, en unas declaraciones que ayer publicó el diario Heraldo de Aragón, aseguraba que "el 30% del agua del Ebro es catalana. Esto está claro, aunque pase bajo los puentes del Pilar, el río no es aragonés". El presidente de la Generalitat añade que Cataluña es "un país pobre, aunque dotado de una enorme voluntad. Cataluña necesita agua para Barcelona, para la industria y para su abastecimiento en general".
Andrés Cuartero, tras señalar que ningún trasvase privará a Aragón de las aguas que necesita, indicó que el Gobierno aragonés está a favor de un plan hidráulico del Ebro, basado en la unidad de cuenca que recoja todas las demandas aragonesas. En este sentido, el consejero de Obras Públicas, Amador Ortiz, dijo en la rueda de prensa que la ley de Aguas es clara y que la unidad de cuenca se debe respetar, máxime en una cuenca como la del Ebro, que afecta no sólo a Aragón y Cataluña, sino a ocho comunidades, que deben ser tratadas de forma igual.
