Cadena de atentados de Iparretarrak en el País Vasco francés
El grupo independentista Iparretarrak (IK) hizo estallar en la madrugada de ayer, en distintas localidades del País Vasco francés, cinco bombas contra las sedes del Partido Socialista (PS) y de la Asamblea para la República (RPR, gaullista), los turismos de dos policías franceses y una vivienda deshabitada propiedad. Los atentados se produjeron tres días después de que el fiscal de Bayona acusara formalmente a ETA Militar de constituir en Francia una "asociación de malhechores" y a las pocas horas de inaugurarse oficialmente la campaña electoral francesa.Las bombas, de mediana potencia, estallaron entre las 3.00 y las 3.10 horas. En Anglet, los turismos de dos policías franceses fueron destruidos y la sede del RPR sufrió algunos daños. La cuarta bomba destruyó parcialmente la entrada del edificio que alberga en Biarritz a la sede del Partido Socialista, y el último artefacto provocó daños de consideración en una casa deshabitada en Souraide.
En las octavillas -con la leyenda Fascistas, policías y notables colaboradores del GAL- abandonadas en las inmediaciones de los escenarios de los atentados de ayer, Iparretarrak dice que aquellas personas que colaboran con la policía son tan culpables como los mismos asesinos.
La cadena de explosiones suscitó ayer reacciones indignadas en los medios políticos vascofranceses. Jean Pierre Desirade, diputado socialista de los Pirineos Atlánticos, departamento que engloba al País Vasco francés, afirmó que desea ver cuanto antes detenciones de militantes de Iparretarrak. Y añadió: "Todos los terroristas que circulan por nuestro pueblo deben ser perseguidos, encarcelados y expulsados, ya sean de los GAL, de ETA o de Iparretarrak". La asociación entre estas dos últimas organizaciones resulta obligada, siquiera sea por la complementariedad de sus estrategias independentistas para el País Vasco.
A la sombra de ETA
Iparretarrak nació a la sombra de ETA Militar, copiando sus planteamientos y deslumbrada por su fortaleza organizativa y política. Hace años, fuentes de la Administración francesa criticaron el cambio de actitud de su Gobierno para con los refugiados de ETA, como consecuencia del análisis que apuntaba la posibilidad de que Iparretarrak llegara a constituirse en un futuro próximo en una organización similar en sus acciones a la de la propia ETAm.Este análisis contradecía la actitud, relativamente permisiva, adoptada hasta entonces por la Administración francesa y cuestionaba el acuerdo de no beligerancia establecido implícitamente con la comunidad de refugiados. Los milis, merced a su influencia sobre Iparretarrak, han frenado cualquier posible escalada de este pequeño grupo, convencidos de que sus acciones perjudicaban la estabilidad de la comunidad de refugiados. En repetidas ocasiones estos últimos han criticado, no sólo veladamente, los planteamientos de Iparretarrak, argumentando que el contexto político de "Euskadi norte" (País-Vasco francés) no es en absoluto equiparable con el de "Euskadi sur".
