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Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

Javier Pradera dimite como jefe de Opinión de EL PAÍS

Javier Pradera ha presentado su dimisión como jefe de Opinión de EL PAÍS, tras haber firmado un manifiesto de apoyo al en el próximo referéndum sobre la permanencia de España en la OTAN y las reacciones que dicha firma ha suscitado.Pradera dirigió el pasado domingo al director del periódico la siguiente carta: "Querido Juan Luis: Siempre he creído, como tú, que la soberanía de un periódico se halla, en última instancia, en' manos de sus lectores. Las críticas recogidas en el artículo publicado hoy [por el domingo] por el ombudsman de EL PAÍS sobre mi participación en un llamamiento pidiendo el sí en el próximo referéndum sobre la OTAN me parecen, en líneas generales, fundadas. Dicho sea de paso, conrio en que esas protestas, para mí justificadas, han sido dirigidas contra cualquier pronunciamiento público que yo hubiera podido suscribir (incluido el consejo a favor del no, la abstención, voto en blanco o voto nulo) y no contra la recomendación específica que contenía.

A mi entender, no es lo mismo que un colaborador habitual de prensa firmante de sus propios artículos apoye una determinada opción política a que lo haga una persona cuyo nombre figura en la mancheta de un periódico, sobre todo si tiene a su cargo lajefatura de la sección de Opinión y participa en la discusión y realización de los editoriales. Sirva como explicación (claramente insuficiente a la vista de los acontecimientos) de mi decisión, objetivamente equivocada, que confié al firmar ese llamamiento en que mi nombre no fuera percibido exclusiva o predominanteinente como el de un periodista de EL PAÍS (al que estoy jurídico-laboralmente vinculado como colaborador), sino como el de un editor (mi profesión desde hace 20 años).

En cualquier caso, me parece inexcusable que aceptes mi dimisión como jefe de la sección de Opinión de EL PAÍS. En nada debe afectar esta decisión, para mí dolorosa, a la amistad que me une a ti y al resto de los compañeros del periódico. Desde luego, me gustaría seguir colaborando en vuestras páginas, pero, a partir de ahora, con artículos firmados. Un fúerte abrazo. Javier Pradera".

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La dirección de EL PAÍS ha intentado disuadir en todo momento a Javier Pradera de que tomara esta decisión personal y reiteradamente ha manifestado su opinión -expuesta en el artículo del ombudsman del pasado domingo- de que la firma del documento por Pradera -y la de otros manifiestos por integrantes del equipo del periódico- no compromete la independencia de éste, toda vez que es el director el único responsable de la línea editorial del diario. Juan Luis Cebrián insistió en que el respeto a los derechos políticos y constitucionales de los redactores de EL PAÍS se mantendría, pues se trata de un periódico pluralista y respetuoso con la libertad individual.

El Comité de Redacción, órgano representativo de los periodistas. de EL PAÍS, hizo público, por su parte, el siguiente comunicado: "La redacción del periódico, reunida en asamblea urgente al tener conocimiento de la decisión de Javier Pradera de dimitir como jefe de la sección de Opinión, ha decidido por unanimidad trasladarle su solidaridad y pedirle que reconsidere su decisión, por las siguientes razones:

1. Que ha ejercido un derecho constitucional incuestionable, que no puede ser limitado ni siquiera por el derecho de los lectores a ser informados imparcial y objetivamente. El propio Estatuto de la Redacción de EL PAÍS, que regula los principios básicos del ejercicio de la profesión, no establece ninguna limitación a este derecho.

2. Que el supuesto y discutible daño que hubiera podido ocasionar a algunos lectores la firma de un documento público por Javier Pradera no es en ningún caso proporcionado al daño cierto que provocaría a los lectores y a esta redacción la pérdida de quien ha sido una pieza fundamental del equipo periodístico de EL PAÍS y que tan generosamente ha trasvasado sus conocimientos y su prestigio intelectual en favor del colectivo de este periódico.

3. Que su dimisión sólo sirve para poner en cuestión los derechos y libertades de los periodistas para manifestarse sobre cualquier acontecimiento sin que por ello se hayan de poner en duda los principios de imparcialidad y objetividad a que están obligados por el Estatuto de la Redacción".

Javier Pradera está ligado a la redacción de EL PAÍS desde su fundación, hace 10 años. Como editorialista y jefe de Opinión del periódico ha realizado una aportación decisiva a la formulación de la línea del diario. Su trabajo constante y cotidiano ha tenido puntual reflejo en la página editorial. Su capacidad intelectual, su entusiasmo profesional, sus dotes para el análisis político y la finura de sus criterios han servido para dilucidar no pocas cuestiones complejas sobre las que EL PAÍS se ha pronunciado desde la fecha de su aparición. Su entrega profesional tiene también reflejo en otras áreas y actividades del diario, que vienen beneficiándose de su impecable comportamiento como periodista y escritor independiente.

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