UGT del metal no acepta la rebaja salarial a cambio de reducir la jornada

La UGT del metal se opondrá a la rebaja salarial como compensación a la reducción de jornada, y presentará hoy en el comité confederal una enmienda a la ponencia oficial que, precisamente, se define a favor de este criterio, según confirmó ayer Antonio Puerta, secretario general. de la federación del metal de UGT. Puerta no ahorró críticas hacia la actitud de la Administración que calificó de frívola en el tratamiento de los flecos de la reconversión, y aseguró que la UGT de metal no iba a aceptar incrementos salariales por debajo de la inflación prevista.Las afirmaciones de Puerta suponen un giro radical, respecto a la actitud conciliadora que ha mantenido la federación del metal en los últimos meses. Y en esta línea manifestó que en la presente negociación colectiva, su federación defendería incrementos salariales, "iguales, al menos, a la inflación prevista". En ningún caso aceptará la aplicación de la cláusula de descuelgue para las empresas públicas en crisis, por entender que, "el hecho de haber aceptado previamente ajustes de plantilla, hace innecesarios nuevos sacrificios. En estas empresas se pedirán incrementos iguales al IPC".

El secretario general de la federación más importante de UGT subrayó que la postura de esta organización era contraria a asumir rebajas salariales a cambio de la reducción salarial. Puerta indicó que en el sector del metal estaba demostrado que la reducción de jornada no produce creación de empleo, y que, en definitiva, "es la introdución de nuevas tecnologías la que reduce el tiempo de trabajo, aumenta la productividad y no genera nuevos empleos". Puerta afirmó que el metal presentará una enmienda a la ponencia elaborada por la ejecutiva confederal. La ejecutiva se pronuncia a favor de asumir rebajas salariales a cambio de la reducción de jornada.

Críticas para todos.

Puerta no ahorró críticas ni hacia la Administración ni hacia los mismos sindicatos. Sobre la primera afirmó que la postura que los responsables de Economía estaban tomando sobre los temas pendientes de la reconversión industrial había dejado de ser de "relajo, para pasar a ser de auténtica frivolidad". Respecto a los sindicatos -y en sus palabras incluyó a UGT- dijo que resultaba preocupante que dedicarán sus esfuerzos a cuestiones políticas, como puede ser el debate de la OTAN, y no a desarrollar una auténtica actividad sindical.

Según Antonio Puerta, se detecta un retraso evidente en la negociación colectiva, que viene motivado fundamentalmente por esta actitud política de los sindicatos que han abandonado sus objetivos prioritarios. En este sentido afirmó que la UGT del metal presionaría "de forma contínua, y sin ahorrar incluso medidas que puedan lesionar a las empresas, para agilizar la negociación colectiva".