Detectada radiactividad fuera de la planta de uranio accidentada
Las autoridades norteamericanas detectaron ayer "un cierto nivel de contaminación radiactiva" en la carretera número 10, que pasa por las cercanías de la planta de procesamiento de uranio de Webbers Falls, en el Estado norteamericano de Oklahoma. En dicha central, propiedad de la empresa Sequoyah Fuels, filial de la KeraMcGee, se produjo el sábado una explosión provocada por el escape de 12,6 toneladas de hexafluoruro de uranio, que causó la muerte de un obrero y la hospitalización de otras 100 personas.
El portavoz de la Comisión Reguladora de la Energía Nuclear de EE UU, Clyde Wisner, manifestó que la contaminación detectada fuera de la planta es de "muy bajo nivel" y no presenta peligro para la salud y la seguridad de los alrededores. La Comisión ha descubierto también que el cilindro que estalló contenía unos 1.000 kilogramos más de haxafluoruro de uranio de lo que está previsto por las normas de seguridad para ese tipo de envases.
