Los episcopados vasco y navarro exigen que el referéndum sobre la OTAN sea vinculante
Las diócesis eclesiásticas del País Vasco y Navarra han solicitado públicamente, a través de un documento, la celebración de un referéndum vinculante sobre la OTAN que lleve consigo la denuncia del Tratado de Washington si el resultado es adverso a la permanencia española en la Alianza Atlántica. En el texto, supervisado por los obispos de las comunidades autónomas, se defiende "la neutralidad como única actitud realmente pacífica".Los representantes de la Iglesia de las comunidades autónomas vasca y navarra han dado a conocer un documento en el que, con el titular Objetivo: la paz ante el referéndum sobre la OTAN, señalan que el resultado de la consulta popular debe ser "vinculante, por encima de los intereses de partido".
Los secretariados sociales abogan por la necesidad de convocar al pueblo español a las urnas. "La palabra y la ética del Gobierno socialista", señalan los representantes del clero, "están comprometidas por las promesas que pregonaron incluso en los primeros tiempos de llegar al Gobierno".
En el documento se señala que, "aunque el referéndum tiene un carácter consultivo, la fuerza vinculante proviene en este caso de la propia promesa electoral. Por ello, si la decisión del pueblo es contraria a la pertenencia a la OTAN, el Gobierno debe adoptar inmediatamente las medidas tendentes a la denuncia del Tratado de Washington, y. no esperar a nuevas elecciones donde se incluiría la permanencia en la OTAN en el programa electoral".
El comunicado señala luego que, sin las mencionadas condiciones, el referéndum se convertiría en un fraude político, dado que privaría de veracidad a la consulta popular y con ello se resentiría la fortaleza del sistema democrático.
Los representantes de la Iglesia vasco-navarra manifiestan, por otra parte, que la opción de neutralidad supone la única actitud realmente pacífica, al rechazar toda conexión con cualquier idea de un poder militar ofensivo concreto, y al apreciar corno verdadero enemigo toda actitud de violencia que surge en nosotros contra los demás".
En este sentido, los autores del documento precisan: "Podemos ser neutrales y así contribuir más y mejor a la causa de la paz (-) Es la actitud, en sí misma, que consideramos más coherente con el evangelio de la paz".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Zelenski y Trump volverán a hablar para alcanzar un acuerdo sobre el futuro de Ucrania
El Gobierno acelera la reforma de la financiación para salvar la legislatura (y apaciguar a los socios)
Elon Musk, Jeff Bezos y Amancio Ortega… así cerraron el año los hombres más ricos del planeta
¿Qué está pasando en Nigeria? Claves del ataque estadounidense contra el Estado Islámico
Lo más visto
- Acuerdo en Villamanín por el Gordo sin repartir: la comisión de fiestas cede más de dos millones por la paz del pueblo
- Maisa Hens, cantante: “Gracias al anuncio de El Almendro no tuve que volver a hacer un ‘casting”
- Junqueras avisa de que la recaudación del IRPF es “imprescindible” para negociar los presupuestos de Sánchez e Illa
- Timothy Morton, activista: “Estados Unidos es un gigantesco campo de concentración”
- La obsesión de Trump por poner su nombre a todo carece de precedentes en Estados Unidos




























































