Menos actividad económica e inflación para el conjunto de Occidente
La OCDE ha bajado del 3,2% al 2,7% sus anteriores estimaciones sobre el aumento de la actividad durante el presente año en sus 24 países, publicadas a principios de junio. En cambio, mantiene las relativas a las subidas de precios en 1985 (un promedio del 4,7%) y reduce dos décimás (hasta el 4,5%) las esperadas para el próximo año.
Pese al citado freno en el crecimiento económico, reafirma que se podrá repetir en 1986 el aumento del 2,7%. A ello contribuirán la baja de la cotización del dólar y de los precios del petróleo, factores que se se reflejarán en el descenso de la inflación y de los déficit de las balanzas de pagos, aun cuando la economía norteamericana representa más de una tercera parte de toda la OCDE y está sometida a presiones en sentido inverso.
Efectivamente, además de indicar que la economía de Estados Unidos crecerá un 2,5% durante el presente ejercicio -0,7 puntos menos de lo previsto en junio-, apunta que su inflación será en 1986 dos décimas superior al 3% de 1985 y que su déficit corriercial volverá a crecer unos 20.000 millones de dólares, hasta 146.000 en 1986. También su actividad económica tiende a mejorar varias décimas en 1986, para enfriarse de nuevo de forma equivalente en el segundo semestre y en el primero de 1987. Pero el desempleo afianzará su leve descenso de 1985 (ha pasado del 7,5% al 7,2%) y el 7,2%. en los tres próximos semestres.
Japón y Alemania, al mantener tasas superiores a EE UU en expansión económica e inferiores en precios para ambos años, podrán elevar 7.000 y 9.000 millones de dólares el superávit de sus balanza de pagos. El paro subirá en el primero del 2,5% al 2,7% y en el segundo bajará del 8,2% al 8%.