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Laurel anuncia su candidatura a la presidencia filipina

El dirigente opositor filipino Salvador Laurel anunció ayer por sorpresa que se presentará como candidato a la presidencia de su país en las elecciones convocadas para el 7 de febrero, rechazando la posibilidad de formar parte, como candidato a vicepresidente, de la lista encabezada por Corazón Aquino, viuda del asesinado Benigno Aquino. La oposición filipina acudirá dividida, por tanto, a las elecciones presidenciales, en las que el actual jefe del Estado, Ferdinand Marcos, se presentará a la reelección, tras 20 años de gobierno.

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Del oficialismo a la oposición

El ex senador Salvador Laurel, que había aceptado inicialmente renunciar a sus aspiraciones presidenciales para formar parte de una fórmula opositora única, anunció ayer el fracaso de las negociaciones, que se mantuvieron hasta la madrugada del domingo. Según explicó, Corazón Aquino rechazó en el último minuto presentarse bajo los colores del partido de Laurel, la Unión Nacionalista Democrática (Unido), que es la mayor coalición antigubernamental."No me dejó más alternativa que presentar mi propia candidatura. Yo puedo sacrificar mi propia opción, puedo sacrificar la presidencia, pero no puedo sacrificar mi partido y mis principios", dijo Laurel en una conferencia de prensa. Explicó además que, de acuerdo con el sistema electoral, algunos votos no serían tomados en cuenta si tanto Aquino como él se presentaban como candidatos a presidente y vicepresidente en la misma lista, pero por distintos grupos.

Corazon Aquino, de 52 años, entregó más tarde un comunicado escrito en el que desmentía la versión proporcionada por Laurel. Según la nota, "no es exacto" decir que ella rehusó presentarse por el partido de Laurel. La verdad, explica, es que ella propuso que ambos fueran presentados por la coalición Unido-Laban, alternativa que Laurel rechazó. Laban (La Lucha del Pueblo) es una agrupación recientemente formada para apoyar la candidatura de Corazón Aquino, que recolectó un millón de firmas en su favor. Unido, coalición de partidos locales y regionales, tiene 40 de los 57 escaños de la oposición en el parlamento nacional, de 183 miembros, elegido el año pasado.

Tras la conferencia de prensa, Laurel declaró a la agencia France Presse que la proposición hecha a Aquino está aún en pie y que espera mantener nuevos encuentros con ella esta semana. Otras fuentes de la oposición declararon que la ruptura no es definitiva y que los dos sectores deberán reexaminar sus posiciones para superar sus divergencias y presentar una candidatura única de oposición.

"Todo puede ocurrir esta semana. La puerta está aún abierta", dijo Laurel. Horas después de la conferencia de prensa de Laurel, Corazón Aquino reafirmó su disposición a formar una candidatura conjunta e indicó que aún confiaba en una posible solución de la crisis. Se negó, sin embargo, a responder preguntas, aduciendo que estaba "exhausta", tras las deliberaciones del pasado sábado.

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El miércoles, fecha tope

La decisión de formar una lista conjunta debe alcanzarse antes del miércoles próximo, fecha tope para presentar candidaturas, según lo dispone la convocatoria electoral hecha por el presidente Marcos la semana pasada.

Laurel dijo que, de persistir el fracaso de las negociaciones de unificación de las candidaturas, incluirá en su lista a una mujer para vicepresidente. Se mencionan los nombres de Minnie Osmena, hija del veterano dirigente opositor Sergio Osmena, y de Judi Roxas, viuda del ex dirigente del partido liberal Gerardo Roxas. Según los observadores, si ambas candidaturas opositoras se presentan separadas, el actual presidente, Ferdinand Marcos, ganará la elección.

De acuerdo con la ley electoral filipina, sólo un partido puede ser acreditado como el principal partido opositor, un estado que le otorga acceso a presentar observadores en los comités electorales y en los centros de votación el día de los comicios. Fuentes políticas dijeron que Laurel buscaba que su agrupación fuera la que presentara oficialmente la candidatura de Aquino para asegurarse la denominación de partido principal, con miras a las elecciones provinciales y municipales en mayo, aun al precio de ceder su opción presidencial.

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