Cierre de un colegio en Burgos por falta de limpieza ante el desacuerdo entre Ayuntamiento y Educación

El contencioso que desde hace dos años mantienen el Ayuntamiento de Burgos y el Ministerio de Educación sobre el pago de los servicios de mantenimiento de los colegios públicos de EGB -el alcalde sostiene que estos gastos corresponden al ministerio, y viceversa- ha dado lugar en los últimos días a situaciones límite en algunos colegios de la capital. Desde el pasado jueves el colegio público de prácticas, en el que estudian 900 niños, cerró sus puertas con carácter indefinido por decisión del claustro de profesores y la asociación de padres, ante la imposibidad de continuar las clases debido a la falta de higiene y la suciedad acumulada tras la determinación del Ayuntamiento de retirar el servicio de limpieza.Éste no es el único caso. Hace unos días la asociación de padres de alumnos del colegio público Marceliano Santamaría se encerraba en el centro para protestar por la situación en que se encuentran las instalaciones del colegio, estado calificado por los afectados como "de auténtica pocilga". Según los padres, que junto a profesores y alumnos efectuaron una manifestación, el colegio tiene graves problemas de calefacción, instalación de luz, etcétera, y debido a la polémica entre el ayuntamiento y el ministerio, nadie se hace responsable de la situación.