La OPEP no tomará acuerdos definitivo sobre precios en la conferencia de Ginebra

El invierno va a salvar momentáneamente a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y evitar que el consorcio adopte, en la conferencia ministerial que comienza hoy en Ginebra, decisiones definitivas respecto a una modificación sustancial de sus tarifas oficiales. La firmeza momentánea que presenta el mercado libre de crudo, con los precios al mismo nivel que los oficiales, se ha convertido en un aliado coyuntural y providencial para el consorcio.

Aunque el tiempo en esta ciudad es más bien templado, con temperaturas medias de 10 grados centígrados a lo largo de esta última semana, las previsiones meteorológicas para el invierno que acaba de comenzar son favorables, en general, para los intereses de los jeques del petróleo. La posibilidad de temperaturas extremas en Europa y Estados Unidos, los dos principales mercados de petróleo, ya han tenido su efecto y han producido un alza significativa de los precios.Según el último número de la publicación especializada Petroleum Intelligence Weekley (PIW), "los hechos de los mercados libres del petróleo son indiscutibles: los precios de los productos están experimentado una recuperación dramática, las refinerías están disfrutando de nuevo de márgenes atractivos y los precios de los crudos han alcanzado cotas no conocidas desde principios de la década".

La demanda de petróleo crudo se ha recuperado y la OPEP ha vuelto a sobrepasar, en las últimas semanas, su propia cuota de ventas en el mercado mundial. Según datos contrastados por la organización, las ventas conjuntas de la OPEP superaron los 18 millones diarios de barriles, es decir, dos millones más que su propio techo y más de cuatro millones que en los meses de septiembre y octubre. El aprovisionamiento de existencias de las compañías ante el invierno se presenta como la causa fundamental de este cambio de tendencia.

El largo plazo

Ante esta situación, es poco probable que el consorcio considere en Ginebra soluciones a largo plazo para el problema fundamental que tiene planteado y que consiste en la creciente competencia que experimenta en el mercado por parte de los productores de crudo no englobados en la organización. Esta creciente competencia se ha traducido en precios por debajo de las tarifas oficiales y en la adopción de políticas insolidarias dentro del consorcio. El jeque Yamani, ministro de Petroleo de Arabia Saudí, principal productor de la organización, había advertido que el precio oficial del petróleo, que ahora está fijado en 28 dólares, podría descender a menos de 20 dólares la próxima primavera si los 13 países miembros del consorcio no miran hacia el futuro y adoptan una política de precios y producción a más largo plazo.Pero Yamani apenas ofrece propuestas novedosas para resolver él dilema de la OPEP. La limitación de la producción ha probado ser inefectiva debido a las perentorias necesidades financieras de algunos de sus miembros, que se ven forzados a ofrecer importantes descuentos en sus ventas con el fin de no perder clientes y mantener así los ingresos necesarios.

Una vuelta a la política de disciplina parece poco probable, a pesar de que, por razones coyunturales, es muy posible que la Organización de Países Exportadores de Petróleo decida en Ginebra posponer su problema hasta que éste se plantee, es decir, la próxima primavera. La convocatoria de una reunión para mediados de marzo es, probablemente, el único acuerdo posible en la conferencia ordinaria del consorcio que comienza, oficialmente, esta mañana en la ciudad suiza.