CC OO rechaza la ley de Cesión del Patrimonio Sindical

CC OO rechazó ayer la ley sobre Cesión del Patrimonio Sindical por entender que no respeta el principio de neutralidad, al ser el propio Gobierno quien se queda con la propiedad de los bienes. Tampoco está de acuerdo en que el patrimonio histórico sea entregado únicamente a UGT y CNT. Marcelino Camacho, secretario general de CC OO, volvió a insistir en que se estaba asistiendo a una campaña de acoso contra el sindicato y calificó de "pucherazo" la forma en que se llevará a cabo la devolución del patrimonio sindical.Camacho reiteró que se estaba asistiendo a una operación de cerco a CC OO y encuadró dentro de esta campaña las informaciones difundidas por este periódico sobre la marcha del sindicato de José María Corell, dirigente de la corriente socialista. Otro ejemplo de esta operación, según Camacho, es la cláusula recogida en los Presupuestos generales, según la cual se detraerá de la subvenciones sindicales las deudas que las centrales tengan con el Estado. Reyes Hidalgo, secretario de organización de CC OO, admitió que esta organización tenía deudas con el Estado, pero que también las tenían los partidos y no se tomaba con ellos esta medida.

En la conferencia de prensa, CC OO presentó la enmienda a la totalidad de la ley del patrimonio sindical, presentada por el PCE. Según la enmienda, el patrimonio sindical histórico debe ser repartido entre todos los sindicatos, no sólo entre aquellos que ostentan las siglas históricas -CNT y UGT-, tesis con la que coincide CC OO. Según el secretario general de CC OO, los bienes del antiguo sindicato vertical estaba formado por 106 centros deformación; 118 instalaciones residenciales, deportivas y similares; 635 casas sindicales; 520.000 acciones del Banco Rural y Mediterráneo, con un valor en bolsa, en 1977, de 1.585 millones de pesetas, y 176.000 viviendas.