Un vecino denuncia a un inspector de policía que mató a su perro con su arma reglamentaria
Un inspector del Cuerpo Superior de Policía, de quien no se conoce el nombre, pero sí su placa de identificación, ha sido denunciado por un ciudadano por matar a su perro a tiros en el parque de la Arganzuela. A su vez, el inspector denunció a su denunciante por las lesiones que le ocasionó el perro de aquél, y que, según la declaración del policía, motivaron que sacara su pistola reglamentaria y le diera muerte. El ciudadano en cuestión ha resaltado que, al margen de la muerte de su perro, "lo preocupante es la facilidad con que policías fuera de servicio hacen uso de sus armas".Los hechos que han motivado el cruce de denuncias ocurrieron aproximadamente a la una de la madrugada del 28 de septiembre. "Yo bajé con mi perro, Yam, un mastín de 60 kilos de peso y cinco años de edad, con el perro de otro vecino, y me reuní en el parque con una amiga que también sacaba a pasear a dos canes de su propiedad", cuenta Miguel Sanmiguel, vecino de Marqués de Vadillo, propietario del mastín muerto a tiros. Sanmiguel, de 33 años, está casado, tiene un hijo y trabaja como auxiliar de clínica.
Una bala en el pulmón
"El parque estaba prácticamente solitario. Mi perro iba suelto, tanto por la ausencia de gente como por mi certidumbre de que Yam no era un animal agresivo. En un momento dado, Yam se adelantó de nosotros como cincuenta metros y se acercó a un hombre que iba acompañado de una niña y un pastor alemán. Los perros se enzarzaron en una lucha y el hombre intentó separarlos. Yo le grité que los dejara solos, que no pasaba nada, y que, en cualquier caso, era mucho peor ponerse por medio. El hombre cayó al suelo, no sé si empujado en la refriega por alguno de los animales. No creo que le mordieran, porque un mordisco de un mastín enfurecido, no deja simplemente una erosión en la piel. Entonces se levantó, sacó una pistola y disparó contra Yam. La bala le atravesó el pulmón".Sanmiguel cuenta que se dirigió al hombre, que entonces se identificó como policía, y "le increpé por la burrada que había hecho". Entonces llegó un coche de la policía y acompañaron al inspector a la comisaría de Arganzuela. Allí, según han confirmado fuentes de la Jefatura Superior de Policía, puso una denuncia contra Sanmiguel por las lesiones que supuestamente le causó el mastín al que mató.
La versión del inspector resalta que un perro se abalanzó sobre el suyo, y que no pudo zafarse de los dos animales enzarzados porque él llevaba a su perro sujeto por la correa. El inspector, de quien sólo se conoce su número de identificación policial, A-12GO8210, sostiene que el mastín le mordió y que, preocupado además por la presencia de su hija, sacó su arma y disparó. El inspector mostraba erosiones en la piel de la pierna izquierda y mano derecha, según un certificado médico que acompaña la denuncia.
Por su parte, Sanmiguel interpuso otra denuncia por los presuntos delitos de daños y perjuicios por la muerte de su perro y por alteración de orden público por uso indebido de arma de fuego.
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