El director de la cárcel de Huesca, denunciado por malos tratos

Un colectivo de seis abogados de Zaragoza, en ejercicio y miembros de la Asociación de Familiares y Amigos de Presos y Ex presos (AFAPE), ha presentado ante el juzgado de instrucción de Huesca una denuncia contra el director y funcionarios de la prisión de esa ciudad, por entender que existen indicios racionales de delito en el trato que reciben los internos. La denuncia, remitida también al juez de vigilancia, está basada en las cartas que los abogados han recibido en sus despachos, en las que unos 48 reclusos acusan de malos tratos a algunos funcionarios. Firman el escrito los letrados Rosa Fernández, Pascual Aguelo, Pedro Santisteve, Javier Checa, Carmen Fernández y Miguel Alcazar.Por otra parte, AFAPE ha presentado públicamente un informe sobre la situación en la cárcel de Huesca a raíz de que 50 presos preventivos, menores de 21 años, fueran trasladados desde Zaragoza al encontrarse en obras la prisión de esta ciudad. El grupo de presos ha denunciado "ser objeto de amenazas, coacciones, humillaciones y acoso por parte de algunos funcionarios; sufrir torturas psicológicas y manipulación de la correspondencia". También denuncian "malos tratos físicos y psicológicos, ya que por las noches acostumbran a entrar en la celda cuatro o cinco funcionarios a vejar, amenazar y humillar, con la morbosa intención de verlos desnudos". Este trato se extiende a los familiares de los internos durante las visitas, ya que "son desnudados completamente, les tocan el cuerpo y, para más escarnio, les obligan a hacer flexiones y tocan sus partes íntimas".

El director del centro, Joaquín Gracia, difundió un comunicado en el que manifiesta su intención de no entrar en polémica sobre la verdad o no de las denuncias presentadas por AFAPE. "Son temas que sólo a los correspondientes órganos ejecutivos y judiciales corresponde asumir", añade. Asimismo, hace un llamamiento al respeto y consideración "hasta que esas denuncias no sean probadas por quien corresponde". El director concluye: "Los funcionarios del centro somos los primeros en desear las investigaciones correspondientes".