Fernando Morán declara que la entrada de España en la CEE peligró por Gibraltar

Fernando Morán, ex ministro de Asuntos Exteriores, reveló en Tenerife, durante una conferencia que tituló Balance de una negociación, que en 1983 tuvo que enfrentarse, bajo su responsabilidad personal, a la posibilidad de que el Reino Unido intentara presionar a España para que renunciara a sus reivindicaciones sobre Gibraltar a cambio de ingresar en la Comunidad Económica Europea (CEE). Morán defendió entonces la idea de que, en ese caso, España sacrificaría su voluntad de pertencer a la Comunidad. El problema de la Roca, que calificó de uno de los fantasmas en medio de las discusiones realizadas para la adhesión, dio paso a un período de más de un año de negociaciones secretas con los británicos, y se consiguió espantar aquella amenaza. El anterior jefe de la diplomacia española citó este episodio, que hasta ahora había pasado desapercibido, durante una conferencia pronunciada en la noche del pasado viernes."El fantasma", relató el ex ministro, "tomó la siguiente forma bajo su sábana blanca: los británicos podrían aprovechar los principios comunitarios para renovar el tratado de Utrecht y colocar la cuestión de Gibraltar en una base distinta". Según explicó, en 1983 el Gobierno español comunicó a los países europeos que "un intento de este tipo no sería admitido por España". Morán se reafirma ahora en su convencimiento de que se hizo bien en jugar fuerte, al hacer saber entonces a los diez que "en el caso de tener que optar a renunciar a la reivindicación de Gibraltar para entrar en la Comunidad, renunciábamos a entrar en la Comunidad. Y esto fue una responsabilidad mía".