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Emilio Tomé

Capitán de Infantería, tiene bajo su mando al Príncipe de Asturias en la Academia General de Zaragoza

El capitán de Infantería Emilio Tomé de la Vega es el jefe de la sección en la que el Príncipe de Asturias aprende la instrucción y toma su primer contacto con la carrera militar en la Academia General de Zaragoza. Nacido en Madrid hace 31 años, casado y con dos hijos, experto en topografía, táctica y carros de combate, y un buen profesional, según algunos de sus compañeros, Emilio Tomé sería un profesor más de la academia si no fuera porque la llegada del heredero de la Corona, el pasado día 2, le confiere un carácter especial.

Con un cierto aire de profesor de universidad, Emilio Tomé da una impresión de timidez y de seguridad al mismo tiempo. Sonríe constantemente y durante la conversación se muestra parco en palabras. Sencillo y de una amabilidad exquisita, el capitán pide disculpas por estar a la defensiva, "como en la guerra", según reconoce, para no sobrepasar el límite acordado, pues tiene órdenes de sus superiores de no desvelar interioridades del comportamiento y de la enseñanza del Príncipe.Emilio Tomé, hijo de militar, lleva en el Ejército 12 años, desde que ingresó en la Academia de Zaragoza, donde ahora es profesor desde hace seis años. Ha realizado cursos sobre carros de combate, operaciones especiales, paracaidismo e inglés, y, recientemente siguió en Estados Unidos otro curso avanzado de infantería" durante siete meses, en el que capitanes norteamericanos y españoles profundizaron en temas tácticos. A su vocación militar une la de docente. Está convencido de que realizan una labor importante como profesores en la academia.

Para él esta etapa es una buena experiencia y ve difícil que continúe siempre en este destino, aunque, puntualiza, "en el Ejército siempre somos profesores". Sus seis años como profesor le han permitido tener una visión global del nivel cultural con que llegan los aspirantes: "En general es bueno, aunque algunos aspectos se descuidan; por ejemplo, cometen faltas de ortografía". La enseñanza en la academia se ha, modernizado en los últimos tiempos. Una prueba de ello, ha sido la introducción de la informática. "De medios estamos bien dotados, pero es lógico que nos gustaría tener más", dice el capitán Tomé.

La jornada en este centro castrense,comieíma a las 6.30 horas y concluye a las 22.30 horas. El capitán Tomé está con la sección del Príncipe, impartiendo diversas materias, desde las 8.00 a las 17.30 horas. Se trata de una preparación general para después afrontar el primer curso, con especial incidencia en la instrucción y en las ordenanzas militares. Cada sección se compone de 36 alumnos, y para determinadas materias, como informática y armamento, se divide en grupos más pequeños.

El capitán Emilio Tomé, de mediana estatura, y que no fue el número uno de su promoción, tiene como, aficiones los depones en general. Le gusta, correr por el monte, practicar el cross, y el curso pasado formaba parte del equipo de fútbol sala de la academia. Siente gran atracción por la montada y otro de sus hobbies es la ornitología. "Bueno, en realidad el aficionado es mi hermano: yo le ayudo a anillar diversos tipos de aves", aclara. Extrañado del interés informativo que su persona ha despertado, reconoce que todo debió comenzar cuando él recibió al Príncipe de Asturias, el pasado día 2 y le acompañó hasta su habitación.

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