Abascal logró un nuevo triunfo en Roma
El español José Manuel Abascal terminó su temporada europea con un nuevo triunfo en los 1.500 metros de la Golden Gala romana. Fue su tercer éxito en una prueba del Gran Premio. En una carrera lenta y táctica, como casi todas las de la reunión, corrió casi siempre encerrado, pero supo atacar a falta de 200 metros y con su tremendo ritmo actual no dio opción a sus rivales, el sudanés Omar Jalifa, el norteamericano Steve Scott y el suizo Pierre Deleze. En la clasificación absoluta del Gran Premio se impusieron Mary Decker y Doug Padilla, éste ante la ausencia del marroquí Said Auita, lesionado.
El santanderino Abascal volvió a demostrar su gran momento de forma y la lástima fue que no pudo vencer en la clasificación final del Gran Premio en los 1.500 metros, por un solo punto. El tercer lugar del norteamericano Steve Scott en la prueba le permitió sumar 30, por 29 del español. En cualquier caso, incluso con una carrera lenta para un atleta que no tiene final como él, demostró que su ritmo progresivo ahora en los últimos metros es. irresistible. Ganó con 3.36.2 1, por 3.36.45 de Jalifa, 3.36.88 de Scott y 3.37.08 de Deleze, que se hundió estrepitosamente en la última recta. La prueba, sin la presencia de Said Auita, lesionado y quizá ya cansado para intentar récord, fue puramente táctica porque lo que se buscaba anoche era, mucho más que nunca, el dinero.
Dólares
El triunfo en cada especialidad del Gran Premio, después del calendario de 15 pruebas, suponía 10.000 dólares (1.700.000 pesetas); 7.000 (1.190.000), al segundo y otras cantidades inferiores a los siguientes clasificados. Las citadas cifras fueron las ganadas anoche por Scott y Abascal. La norteamericana Mary Decker, en cambio, que no sólo venció en su prueba, los 3.000 metros, sino en la clasificación absoluta del Gran Premio, al conseguir la puntuación más alta, sumó 25.000 dólares más (4.250.000 pesetas). Decker hizo una nueva exhibición, por delante de la rumana Maricica Puica y de la británica, ex surafricana, Zola Budd. No sólo resistió el ataque de la rumana a falta de 250 metros, sino que se estiró espléndidamente en los últimos 100 y con 8.25.84, récord de Estados Unidos, logró la segunda mejor marca de todos los tiempos tras el récord mundial de 8.22.26 conseguido el año pasado por la soviética Tatiana Kazankina.
La clasificación absoluta masculina, al no correr Auita en los 1.500 metros, pasó a ser encabezada finalmente por el norteamericano Doug Padilla, vencedor en los 5.000 ante su compatriota Sydney Maree. El plusmarqista mundial de salto con pértiga, el soviético Serguei Bubka, hubiese podido superarle si además de ganar la prueba, con sólo dos saltos, 5,70 y 5,85 metros, hubiese elevado su récord mundial de 6 metros un centímetro más. Pero falló claramente los tres intentos.
El español Carlos Sala logró meterse en la final de 110 metros vallas al ser cuarto en una de las series semifinales, como el italiano Fontecchio en la otra, ambos con tres norteamericanos por delante. En la final ganó Tony Campbell (13.27).
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