Una larga disputa por la desmilitarización
La ley orgánica de Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado, que prevé la desmilitarización de la Policía Nacional y su unificación con el Cuerpo Superior de Policía, ha motivado continuas protestas por parte de los sindicatos policiales, que se han acentuado durante los últimos meses. El proyecto de reforma policial, contenido en el programa socialista, fue asumido por el ministro José Barrionuevo, quien al principio de su mandato se comprometió a presentarlo en las Cortes antes del verano de 1983.Sin embargo, la conflictiva situación interna en el ministerio paralizó esta reforma global y se pensó en llevarla a cabo de forma progresiva.
Una fecha clave en los enfrentamientos entre Interior y los sindicatos fue marzo de este año, cuando 300 policías pertenecientes a la 3ª Compañía de la Policía Nacional de León se encerraron como protesta por la forma de ejercer el mando del capitán de Infantería, Francisco Javier Álvarez. La oposición a la militarización pasó a ser el eje de esta polémica que fue asumida por el Sindicato Unificado de Policía (SUP), sindicato mayoritario del cuerpo y por los minoritarios Sindicato Profesional de la Policía Uniformada (SPPU) y Asociación Profesional Independiente de la Policía (ASIP). El incidente quedó zanjado con el cese por el ministro Barrionuevo de ocho mandos de la Policía Nacional motivado por su postura deifavorable a la reforma.
Durante el pasado agosto se produjo una radicalización de las posturas de los sindicatos que han estudiado llevar a cabo medidas de presión, incluida la huelga general, para protestar por la política del Ministerio del Interior. El principal desencadenante fue la sanción con tres años y 21 días de suspensión de funciones y 12 días de haberes a Modesto García, inspector del Cuerpo Superior de Policía, ex secretario general de la Unión Sindical de Policía (USP) por tres faltas cometidas a lo largo de los ocho últimos meses.
Una postura unitaria
El día 12 de agosto, durante una reunión en Madrid entre los representantes los sindicatos USP, PUP, SUP y USPM, se estudió la posibilidad de desarrollar manifestaciones de protesta a partir del día 2 de octubre, fecha que se pretende convertir en el día de la Policía. En un posterior encuentro sindical en la sede del SUP en Madrid, se decidió constituir unacoordinadora para mantener una postura común en las reivindicaciones sobre la futura ley orgánica de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Asimismo, se solicitó una entrevista con Barrionuevo para abrir una nueva vía de diálogo. La coordinadora fue recibida por diversos cargos del ministerio y, finalmente por el propio el ministro el pasado día 2 de septiembre.
El proyecto de ley fue aprobado por el Consejo de Ministros celebrado el pasado lunes, tras él el ministro del Interior informó a la coordinadora que el Gobierno permanecería inflexible en su postura de no conceder el derecho de huelga a la policía y precisó que el nuevo Cuerpo Nacional de Policía resultante de la unificación será considerado "instituto armado de carácter civil".
