El gobernador civil de Tarragona pedirá la revisión de la licencia de explotación de la central de Ascó
El gobernador civil de Tarragona, Vicente Valero, remitió ayer un telegrama al alcalde de Flix, Pere Muñoz, en el que le anuncia la incoación de un expediente sancionador a la central nuclear de Ascó y la revisión de la renovación de su permiso de explotación. Valero se excusa por no haber informado a los municipios del área de Ascó de la avería registrada el viernes por la noche en la central nuclear. Por otra parte, el alcalde de Montroig, localidad situada a seis kilómetros de la central de Vandellós, ha rechazado el material que Protección Civil entregó a los municipios afectados por dicha central.
Según el telegrama, el retraso en la información se debió a que la dirección de la central comunicó tarde al Gobierno Civil la avería y las causas. Además de la valoración positiva que las excusas han merecido, lo que mayor satisfacción ha despertado en los ayuntamientos de la comarca tarraconense de la Ribera d'Ebre ha sido el anuncio de Valero de que pedirá a los organismos competentes que estudien el accidente y revisen la renovación de la licencia de explotación de Ascó 1, que debe efectuarse en breve.La apertura de un expediente que investigue las causas tanto del accidente como de la falta de información a los municipios puede acabar con una sanción para la dirección de la empresa explotadora de la central nuclear.
El alcalde de Montroig, Josep Maria Aragonés, ha rechazado el material de Protección Civil entregado recientemente a los municipios afectados por el área de influencia de la central nuclear de Vandellós, por entender que la competencia exclusiva de la seguridad nuclear es del Gobierno, que concedió la autorización a la central. Esta actitud responde a la ejecución de un acuerdo adoptado por la corporación en pleno, que debatió la necesidad de que junto a los elementos técnicos de Protección Civil debían dotarse los medios humanos y las fuentes de financiación para su mantenimiento.
La corporación, al rechazar los equipos, recuerda (que nadie les consultó sobre la instalación de una nuclear vecina al municipio, "una central que se hizo sin plan especial ni proyecto de urbanización, lo que ha traído como consecuencia la salinización de nuestro acuífero por falta de agua en Vandellós". También se critica el reparto del canon energético que efectúa la Diputación y cuyos fondos, según el alcalde de Montroig, no llegan a los municipios de la zona nuclear de Vandellós.
La responsabilidad
Para el alcalde de Montroig, población situada a unos seis kilómetros de la central, la responsabilidad sobre la seguridad nuclear es exclusiva del Gobierno: "El Ayuntamiento no quiere comprometerse en este tema ni en los costes que genera, pues si nos entregan aparatos medidores de radiactividad, no tenemos garantías suficientes de que un día nuestros funcionarios puedan cometer un error en la lectura. Si quieren poner vehículos de Protección Civil, deben pensar también en los conductores, los mecánicos y la gasolina. Sólo faltaría", añadió, "que además de no aceptar la central nuclear tuviéramos que cargar con la responsabilidad y los costes de la seguridad".La Dirección General de Protección Civil entregó ayer a los servicios de Prevención de Incendios de la Generalitat en Tarragona un equipo de material NBQ (lucha antinuclear, bacteriológica y química). Las entregas, valoradas en 150 millones de pesetas, se han realizado en ocho capitales españolas, de acuerdo con el riesgó específico de estos lugares y la existencia de cuerpos profesionales con capacidad para mantener los equipos en permanente operatividad.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.