Goya en el Louvre
En una brevísima visita a París fui inevitablemente al Museo del Louvre, pero mi desilusión fue grande al ver que siete cuadros de Goya están colocados en una es-Pasa a la página 10
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calera y en una encrucijada de pasillos. Se trata de los cuadros La marquesa de Solana, Fernando Guillemat, La Jemme à l'eventail, La marquesa de Santa Cruz, Pérez Castro y Jesús en el monte de los Olivos. Todas obras maestras y de un buen tamaño del pintor de Fuendetodos, relegadas al final de una escalera, lugar de encuentro de salas y corredores, y los que nos paramos a contemplar esas maravillas nos sentimos mareados por la barahúnda de paseantes que recibía el museo en aquel lugar de corte.
Esperemos que en alguna próxima reestructuración de esa maravilla que es el Museo del Louvre se sigan criterios de orden artístico y que no se relegue a un lugar secundario la obra de un maestro universalmente reconocido como lo es Francisco de Goya y Lucientes.- .
